Semejante al Hijo

De Libros y Sermones Bíblicos

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Última versión de 12:49 26 nov 2013

“Sin padre, sin madre, sin genealogía; que ni tiene principio de días, ni fin de vida, sino hecho semejante al Hijo de Dios, permanece sacerdote para siempre” (Heb. 7:3).

- Hebreos 7:2-3

La larga espera para que Dios traiga la renovación final de todas las cosas llevó a muchos en el público original de Hebreos considerar abandonar a Cristo. Como resultado, tenemos una carta recordándoles (y a nosotros) que incluso el padre Abraham tuvo que soportar pacientemente para recibir la promesa (6:15). La promesa a Abraham es un ancla para nuestra alma mientras esperamos la consumación del reino, porque es una esperanza garantizada por Jesús, nuestro Sumo Sacerdote según el orden de Melquisedec (6:20).

Como sacerdote según el orden de Melquisedec, el sacerdocio de Cristo es eterno (5:6, 7:3). Y debido a que Su sacerdocio es eterno, podemos estar seguros de la salvación que Él ofrece (7:23-25). Con el fin de mostrar que Cristo pertenece al eterno sacerdocio de Melquisedec, el autor de Hebreos desarrolla una tipología entre los dos.

La tipología es un método común de interpretación entre los escritores del Nuevo Testamento. En una tipología, los autores del Nuevo Testamento usan ejemplos del Antiguo Testamento de personas y eventos que presagian Cristo. La comparación de Cristo a la narración de Melquisedec de Génesis 14 en Hebreos 7 es un buen ejemplo de tipología. Se nos dice en 7:2 que Melquisedec significa “Rey de justicia.” Esto viene de las palabras hebreas melek, “rey”, y zedek, “justicia” (por lo tanto, “Melquisedec”). También se nos dice que Melquisedec es un rey de paz (Salem – shalom, “paz”). Porque Jesús es el Rey de justicia y de paz, Él está calificado para ser parte de la línea de Melquisedec.

Jesús no sólo cumple la función de Melquisedec, Él la trasciende. En 7:3, vemos que, como Melquisedec, Cristo no tiene ni madre ni padre, ni principio ni fin. Esto puede parecernos extraño. ¿Cómo puede cualquiera de ellos, especialmente a la luz de los relatos del nacimiento en los evangelios, decir que está sin parentesco? Teniendo en cuenta que el autor está escribiendo para hacer un punto de comparación en particular, él simplemente está leyendo Génesis y no está diciendo nada más allá de lo que dijo Moisés. Moisés no escribió una genealogía o narrativa de la muerte de Melquisedec, y así, aunque ciertamente tenía padres, así como un principio y un fin, es como si no tuviera ninguno. Y mientras la narración de Génesis anticipa a Cristo en estos aspectos, Cristo es mucho mayor que Melquisedec porque Él, al menos en su naturaleza divina, es en realidad sin padres y en realidad no tiene principio ni fin. Sólo Cristo es el Alfa y la Omega, el principio y el fin.

Coram Deo

Al comparar Cristo con Melquisedec puede ser fácil pensar que el enfoque principal está en cómo Cristo se asemeja a Melquisedec. Pero en 7:3 se nos dice que es Melquisedec quien se asemeja a Cristo. A medida que trata de emular a los hombres piadosos de la Biblia, recuerde que son piadosos sólo por Cristo.

Pasajes para Estudio Adicional

Sal. 111
Zac. 3:1-5
Juan 1:1-3, 16:33
Fil. 3:8-9

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