Hombres Sabios Aún Le Buscan
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Última versión de 16:27 20 dic 2010
Por Clyde H. Davis
sobre El Evangelio
Una parte de la serie Crossway Tracts
Traducción por Crossway
Los pastores levantando sus largas túnicas se apresuraron hacia él; los Magos se enfrentaron con valentía a desiertos y montañas para encontrarle; en los rayos ardientes del sol de mediodía una mujer desfallecida samaritana vino a él; un escéptico exclamó, “mi Dios y mi Señor” cuando le encontró. Y hoy millones en cada continente reconocen con el apóstol Pablo que él es el “Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí” (Gálatas 2:20).
Hombres sabios aún le buscan; y aquellos que le buscan encuentran más de lo que podrían imaginar. Ya que en Cristo Jesús, y sólo en él, se encuentra el perdón, la paz interior, el gozo en la vida hoy y las promesas de vida eterna.
Los Magos le encontraron como un pequeño con Maria su madre. Hoy le encontramos como el Cristo viviente, vestido de gloria y honor y sentado a la diestra de su Padre en el cielo. Él se encuentra ahí porque terminó la obra que vino a hacer cuando vino a la tierra. De su venida la Biblia dice, “Haciéndose semejante a los seres humanos… se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, ¡y muerte de cruz! Por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo…, para que ante el nombre de Jesús se doble toda rodilla…, y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor” (Filipenses 2:7-11).
Mientras es verdad que hombres sabios aún le buscan, es aún maravillosamente más cierto que él aún nos busca a nosotros–quienesquiera que seamos. Ahora, hoy, desde su lugar celestial viene su divina invitación: “Mira que estoy a la puerta y llamo. Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré, y cenaré con él, y él conmigo” (Apocalipsis 3:20).
Si el presidente te mandara una invitación oficial, seguramente la aceptarías. El bebé de Belén quien ahora es el Cristo de gloria te está invi tando hoy. La puerta es la puerta de tu corazón. Que sepas responder correctamente a su llamada; y que todas sus bendiciones espirituales sean tuyas esta Navidad.
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