Procurando Hacia el Reposo de Dios
De Libros y Sermones BÃblicos
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Última versión de 11:41 22 jul 2013
Por Ligonier Ministries Staff
sobre Perseverancia de los Santos
Una parte de la serie Tabletalk
Traducción por Javier Matus
“Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia” (Heb. 4:11).
- Hebreos 4:11
Desde hace una semana y media, hemos estudiado el reposo sabático que Hebreos 4 promete al pueblo de Dios. Este reposo, como ya hemos visto, es el mismo reposo de Dios donde Él disfruta de Sí Mismo y de Su obra. También disfrutaremos de Dios y de Su obra cuando entramos en Su reposo.
Los capítulos 3 y 4 de Hebreos están llenos de advertencias acerca de entrar en el reposo de Dios. El autor nos dice que el reposo de Canaán era sólo un tipo del reposo completo por venir (4:8). Él también nos advierte que, al igual que la primera generación que salió de Egipto, el pueblo del nuevo pacto de Dios incluye incrédulos que desobedecen al Señor, quienes serán cortados de Su reposo (v. 2). Con estos antecedentes, el versículo 11 nos dice que debemos procurar entrar en el reposo de Dios para que no caigamos como lo hicieron las generaciones anteriores del pueblo de Dios.
La palabra traducida como “procurar” en el versículo 11 significa concentrar las fuerzas de uno para lograr una meta. Este tipo de diligencia es contrario a la actitud que caracterizó a la primera generación de israelitas. La iglesia no debe seguir el ejemplo de Israel del antiguo pacto y desobedecer la Palabra de Dios. Más bien, debemos creer con diligencia en Cristo, o caeremos al igual que cayó la primera generación de israelitas.
En cuanto a este versículo, John Owen escribe que las circunstancias que rodean nuestra entrada en el reposo de Dios son similares a las de la primera generación que salió de Egipto. Al igual que los hebreos, nos encontraremos con dificultades tales como el miedo, el cansancio, los enemigos humanos, la oposición demoníaca, y varios otros tipos de persecución que ponen a prueba nuestra fe. La fe diligente y la obediencia son necesarias para afrontar dichas dificultades y entrar en el reposo de Dios.
Queda una última pregunta: ¿Hebreos 4:11, al ordenarnos a procurar entrar en el reposo de Dios, contradice a Hebreos 4:3, que dice que “los que hemos creído entramos en el reposo”? La respuesta es no. En primer lugar, el reposo que tenemos ahora en Cristo es sólo las primicias del reposo por venir. La plenitud del reposo de Dios incluye, pero será mayor que, el reposo que experimentamos ahora en la tierra. En segundo lugar, la gramática de 4:3 muestra que no contradice a 4:11. El verbo en tiempo presente en 4:3 también puede ser traducido, “Nosotros, los que hemos creído estamos entrando en el reposo de Dios.” La vida cristiana es un viaje, nuestra confesión inicial de fe nos pone en nuestro camino hacia el reposo de Dios, pero sólo la fe genuina garantiza la entrada. Las pruebas requieren que nos esforcemos en la fe (4:11), de modo que la autenticidad de nuestra fe puede ser comprobada.
Coram Deo
Es fácil confiar en Dios cuando todo nos va bien. Los tiempos difíciles y las personas difíciles hacen que sea más difícil mantener esta misma confianza. Dios trae pruebas a nuestras vidas para que dejemos de confiar en nosotros mismos y nos aferremos a Él solamente. La próxima vez que se presente una prueba, pídale a Dios que le muestre cómo confiar en Él y cómo confiar en Él solamente.
Pasajes para Estudio Adicional
Ex. 16
Job 1: 6-2:10
Hechos 14:21-22
2 Pedro 1:10-11
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