Las Extrañas Formas de Nuestro Maravilloso Forjador

De Libros y Sermones Bíblicos

¿Cristo estaba construyendo su iglesia el 11 de Septiembre? La razón por la que surge esta pregunta es la autoridad absoluta y universal detrás de la promesa de Jesús en Mateo 16:18, "Yo edificaré mi iglesia". ¿Quién dijo esto? Aquél quien habló e hizo desaparecer la fiebre (Lucas 4:39), que hizo marchitar los árboles (Marcos 11:21), a quien los demonios le obedecieron (Marcos 1:27), quien saqueó Satanás (Marcos 3:27), quien hizo cesar el viento (Marcos 4:41), quien hizo levantar los muertos (Lucas 7:14; Juan 11:43), quien dió de comer a miles con solo cinco panes y dos pescados (Mateo 14:19-21), y quien hizo convertir el agua en vino (Mateo 14:26) o quien hizo un camino delante de sus pasos (Mateo 4:46).

Este poder sobre el cielo y la tierra y el infierno estaba relacionado explícitamente al compromiso misionario de Cristo para edificar su iglesia. "Edificaré mi iglesia y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella" (Mateo 16:18). "Me ha sido dada toda autoridad en el Cielo y en la tierra. Vayan, pues, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos" (Mateo 28:18-19). En otras palabras, Jesús está comprometido firmemente a usar su poder sobre el cielo y la tierra y el infierno para hacer discípulos. Ningún evento en el universo en el cual Cristo produce o permite está fuera de su propósito de edificar su iglesia.

Pero no luce de esa forma. Sus formas no son nuestras formas. El rara vez se mueve en una línea recta desde A hasta B. La subida es casi siempre hacia abajo. El camino enrevesado de Dios en la historia redentora lleva a Pablo a estas palabras, "Oh, ¡Qué profunda y llena de riqueza es la sabiduría y la ciencia de Dios! ¡Qué insondables son sus designios y qué incomprensibles sus caminos!" (Romanos 11:33).

Por ejemplo, ¿estaba Cristo edificando en forma triunfante su iglesia cuando fue asesinado por sus enemigos y enterrado por tres días? Jesús responde: "Destruyan este templo y en tres días lo volveré a levantar" (Juan 2:19). "Doy mi vida por las ovejas. Y tengo otras ovejas que no son de este corral. . . . Nadie me la quita . . . Tengo la autoridad de darla, y tengo la autoridad de recobrarla" (Juan 10:15-16, 18). En otras palabras, lo que parecía falta y tragedia fue autoridad total - además la adquisición de "otra oveja". Por medio del peor pecado que haya sido cometido alguna vez - el asesinato del Hijo de Dios - Jesús estaba edificando triunfantemente su iglesia.

¿Estaba Cristo edificando su iglesia cuando el apóstol Pablo fue arrestado en Roma? Pablo responde: "Lo que me ha pasado a mí ha realmente servido para avanzar en el Evangelio, para que así pueda ser conocido a lo largo de toda la guardia imperial y a todo el resto que mi encarcelamiento es por Cristo. Y la mayoría de los hermanos, habiéndose convertido en confidentes en el Señor por mi encarcelamiento, están mucho más atrevidos para proclamar la palabra sin temor" (Filipenses 1:12-14). Estoy "encadenado como un criminal. ¡Pero la palabra de Dios no está encadenada!" (2 Timoteo 2:8). En otras palabras, lo que parecía derrota fue un diseño extraño de victoria por Cristo.

¿Estaba Cristo edificando su iglesia en China cuando los Comunistas triunfaron en 1949, dando fin a 150 años de la presencia misionaria protestante? "El crecimiento de la Iglesia en China [desde entonces] no tiene paralelo en la historia. . . . Mao Zedong (Mao Tse Tung) se convirtió involuntariamente en el más grande evangelista en la historia. . . . [Él] buscaba destruir toda la 'superstición' religiosa pero en el proceso esclareció los obstáculos espirituales para el progreso de la Cristiandad. Deng [Xiaoping] dio marcha atrás a los horrores producidos por Mao y liberando la economía, dándole más libertad a los Cristianos. . . . [Hoy] la Iglesia del Señor Jesús es más grande que el Partido Comunista de China" (Patrick Johnstone, Operación Mundo).

Así pues, ¿estaba este Cristo todo gobernante edificando su iglesia el 11 de Septiembre? Respondo con interrogantes que no son meramente hipotéticas. ¿Qué tal si Cristo vio a los aviones dirigiéndose a la destrucción de miles y la agitación de las naciones? ¿Qué tal si, al mismo tiempo, vio a 200 intocables hindúes en India, los Dalits? ¿Qué tal si vio que sus largos siglos de trabajo de desalojarlos de la esclavitud Hindú estaba cerca de llegar a su conclusión en nuestro día y estaban contemplando aplicar el Islam o posiblemente el Cristianismo o el Budismo? ¿Y qué tal si él concibió que este terror relacionado al Islam contra los ciudadanos en New York tendría el efecto masivo de inclinar a millones de Dalits del Islam hacia Cristo? ¿Qué tal si él retuvo su poder de detener a los terroristas ya que (junto con otros 10.000 efectos esperanzadores) él tuvo una visión a la vida eterna de millones de intocables en India? Y si no es esto, quizá mi nieto contará una mejor historia de la gracia soberana.

Uniéndose a Jesús contigo en el Camino del Calvario,

Pastor John