Palabras de esperanza para un bebé nacido ciego

De Libros y Sermones Bíblicos

Queridos John y Diane,

Anoche, mientras oraba con Noel, mi mente estaba agobiada por ustedes. Yo dije: “Señor, oh Señor, por favor, déjame ser un pastor que predica, guía y ama de una manera que hace posibles las imposibilidades de la vida para Tu pueblo con un milagro de la gracia sustentadora. Ayúdame a conocer el peso y el dolor de esta vida y no ser despreocupado cuando las montañas han caído al mar. Ayúdame a tener el aroma de los sufrimientos de Cristo sobre mí. Evita la superficialidad y la insensibilidad al dolor. Señor, hazme, a mí y a mi pueblo, un pueblo que lleve la carga”.

¡Oh, John y Diane, estoy tan agobiado por la ceguera de su hijo! Dios está visitando Belén con tanto dolor en estos días en el nacimiento de niños rotos. Randy y Ann Erickson con el corazón roto de su bebé; Jan y Rob Barrett con el hígado de su bebé fuera del cuerpo; ¡y su pequeño y precioso niño!. ¿Está diciendo el Señor: “Tengo un don para tu comunidad”? Esta no es una carga de dos o tres parejas. Esto es un don y un llamado a toda la iglesia. Esta es una palabra acerca del quebranto de esta era caída de futilidad. Esta es una invitación para que todos ustedes crean que “no tenemos aquí ciudad permanente” (Hebreos 13:14). Esta es una invitación para que “estimen cada ganancia como pérdida por causa de Cristo” (Filipenses 3:7). Esta es una prueba impactante para ver si ustedes se “desanimarán”, cuando de hecho el propósito de Dios es mostrar que Su gracia basta para renovar a nuestra persona interior cada día para hacer frente a la “leve tribulación momentánea que produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria; no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas” (2 Corintios 4:17-18).

Oh Señor, abre nuestros ojos a Tu amor en este dolor. Abre nuestros ojos. “Y oró Eliseo, y dijo: ‘Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para que vea’. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego alrededor de Eliseo” (2 Reyes 6:17). John y Diane, las montañas que rodean sus vidas están llenas de los caballos y carros de Dios. El diablo tiene la ventaja aquí solo ante los ojos de la incredulidad. Dios está trabajando de maneras y por años y generaciones y millones de personas que ahora no podemos imaginar. Esto es nuestro para creer y soportar, sin importar el costo. Esto es nuestro para esta corta vida.

Me parece que esta vida es un terreno probatorio para el reino venidero. A algunos se les pide que dediquen cuarenta o cincuenta años para cuidar a un niño discapacitado en lugar de pasar por la vida sin dolor. A otros se les pide que sean ciegos durante todas sus vidas…

Pero solo en esta vida —solo en esta vida. Quiero ser la clase de persona que toma ese “solo” por lo que realmente es —muy corto. Un preludio de la infinidad del gozo, gozo, gozo. Pero todavía no. No totalmente.

¿Cómo vamos a hacer frente a las cargas de esta vida si creemos que esto es todo lo que hay, o incluso el acto principal en este drama de la realidad? Oh Señor, danos Tu visión de las cosas.

Que Dios los llene de gozo anticipado.

“Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse”.

Los amo,

El Pastor John