Te despiertas en la guerra

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English: You Wake Up in War

© Desiring God

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Por John Piper sobre Hedonismo Cristiano
Una parte de la serie Message Excerpt

Traducción por Harrington Lackey

Transcripción de audio

Lo cambia todo. El hedonismo cristiano cambia todo sobre el buen peleo de la fe. (1 Timoteo 6:12)  En Juan 1:12, Juan dijo <<Pero a todos los que le recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios, es decir, a los que creen en su nombre,>>  Asi que creer es recibir << a todos los que le recibieron - a los que creen en su nombre.>>

Por lo tanto, creer que Jesús salva es recibirlo. ¿Y yo le preguntaría por recibirlo como qué?

 Yo diría que todo lo que es, el tesoro más valioso del mundo. Eso es lo que significa luchar contra la lucha de la fe. A saber, para reconocer continuamente, ver, saborear, recibir a Jesús como más valioso. Jesús es más valioso, lo que significa —decirlo simplemente, la lucha de la fe es la lucha por la alegría.

 Me levanto todas las mañanas y peleo esa pelea. Cada mañana, esa es mi guerra. ¿Quiero mirar Twitter antes de mirar a Jesús? Suena absurdo. Así de estúpido es el pecado. Así que cada mañana, hay guerra en la casa Piper.  No va en contra de mi familia; está en mi contra, y mi viejo hombre que tengo que despojarme una y otra vez (Efesios 4:22) y rezar para que el Espíritu Santo que se derramara sobre mí, para que mis ojos se abrieran; Yo vería y saborearía a Cristo como supremo. Eso es la guerra. Eso se llama la vida de fe. La fe es ver, saborear, el tesoro supremo de Cristo.

 El hedonismo cristiano cambia nuestro combate con el mal. Aquí está la definición hedonista cristiana del mal: << Porque dos males ha hecho mi pueblo:me han abandonado a mí, fuente de aguas vivas, y han cavado para sí cisternas, cisternas agrietadas que no retienen el agua.>> (Jeremías 2:13)

¿Qué es malo? La preferencia suicida de pozos vacíos sobre el río de placeres que fluyen desde el cielo.

 Eso es el mal. Por lo tanto, mi batalla contra el mal no es decir constantemente, <<No, no, no, malo, malo, malo.>> No hay poder en eso. El poder de la carne que viene hacia ti, el poder del diablo que viene hacia ti, ¿y vas a arruinar tu fuerza de voluntad y hacer que sea la victoria? No. No lo estás.

 Una cosa te dará la victoria. << Esta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe. >>(1 Juan 5:4), y la fe está satisfecha con todo lo que Dios es para nosotros en Jesús. Tienes que avivar ese motor todas las mañanas para que los males que te están agarrando pierdan sus colmillos.

 <<No se puede tener a mí. He visto a Jesús esta mañana. La lujuria, no puedes tener conmigo. La codicia, no puedes tener conmigo. El temor del hombre? No puedes tener conmigo. Amargura e ira? No puedes tener conmigo. He visto a Jesús esta mañana.>>

 La batalla contra el mal es totalmente transformada por el hedonismo cristiano.