Un Consuelo soberano en tiempos de incertidumbre
De Libros y Sermones BÃblicos
Por John Piper sobre Santificación y Crecimiento
Traducción por Paola Montano
Transcripción del audio
Si el 2020 nos ha enseñado algo, es que los tiempos siempre son inciertos y nuestras vidas en este mundo son mucho menos estables de lo que creemos. Cada vez más, parece que lo único predecible de la vida es lo impredecible que puede ser. Entonces, en medio la actual turbulencia social, médica y económica que muy pocos de nosotros podríamos haber previsto, ¿Qué promesas eternas nos sostienen? Tenemos algunas promesas increíbles de nuestro Señor y Salvador, Jesucristo, quien aparentemente sabía que nuestras vidas seguirían siendo impredecibles hasta que Él regrese. Así que nos dejó sus últimas palabras en Mateo 28:16–20 (LBLA). Leemos:
Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les había señalado. Cuando le vieron, le adoraron; mas algunos dudaron. Y acercándose Jesús, les habló, diciendo: "Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra. Id, pues, y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado; y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo".
Aquí está la explicación del pastor John sobre lo que esto significa para nosotros hoy en día.
Jesús se acercó y les habló diciendo: “Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra” (Mateo 28:18 LBLA). Bien, esa es una gran afirmación que no cualquiera puede hacer. Esa autoridad le ha sido dada por Dios el Padre. Debido a su muerte, él venció la culpa — venció la condenación. Debido a que resucitó, venció el sufrimiento y venció la muerte. Y ya que él ha triunfado sobre la culpa, la condenación, el sufrimiento y la muerte, también ha triunfado sobre Satanás. Porque la única manera, definitivamente, en que Satanás puede condenar al pueblo de Dios es con culpa y condenación. Y la única manera en que puede atacarnos es con el sufrimiento y con la muerte. Y si el sufrimiento, la muerte, la culpa y la condenación han sido conquistados por Jesús, en su muerte y en su resurrección, ahora Satanás no tiene poder en sus manos para destruir a los creyentes.
Esta es una cosa tremenda. Filipenses 2:9–11 (LBLA) dice,
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le confirió el nombre que es sobre todo nombre, para que al nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en el cielo, y en la tierra, y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.
Esta es otra manera de decir “toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra”. Jesús Tiene Toda Autoridad
Así que, aquí está nuestro Rey, quien nos está dando una misión. Esta gran afirmación, "Toda autoridad ha sido comprada por mí, poseída por mí, dada a mí. Tengo toda autoridad en el universo” – reflexionemos sobre esto un minuto. Toda autoridad. ¿En serio? Toda autoridad.
- Toda autoridad sobre Satanás y todos los demonios y todos los ángeles, sobre el bien y el mal.
- Autoridad sobre el universo natural: objetos y leyes y fuerzas naturales, como las estrellas, galaxias, planetas y meteoritos.
- Autoridad sobre todos los sistemas meteorológicos: vientos, lluvias, relámpagos, truenos, huracanes, tornados, monzones, tifones y ciclones, y todos sus efectos como maremotos, inundaciones e incendios.
- Toda autoridad sobre la realidad molecular y atómica: átomos, electrones, protones, neutrones, partículas subatómicas, física cuántica, ADN, realidad cromosómica.
- Todas las plantas, todos los animales. Sin importar su tamaño: ballenas, secoyas, calamares gigantes y robles gigantes. Todos los peces, todas las bestias salvajes, él tiene autoridad sobre todos ellos.
- Todos los animales invisibles: bacterias, virus, parásitos y gérmenes de todo tipo — él tiene autoridad sobre todos ellos.
- Él tiene autoridad sobre todas las partes y funcionamientos del cuerpo humano. Cada latido de tu corazón, cada movimiento del diafragma, cada pequeño salto a través de un millón de sinapsis en tu cerebro — Jesús tiene toda autoridad sobre todos esos fenómenos fisiológicos en tu cuerpo.
- Él tiene toda autoridad sobre las naciones, gobiernos, congresos, legislaturas, reyes, líderes y tribunales.
- Él tiene toda autoridad sobre los ejércitos, armas, bombas y terroristas.
- Toda autoridad sobre la industria, los negocios, las finanzas y la moneda.
- Toda autoridad sobre el entretenimiento, la diversión, el ocio y los medios de comunicación.
- Toda autoridad sobre la educación, la investigación, la ciencia y el descubrimiento.
- Toda autoridad sobre el crimen y violencia, sobre cada familia y vecindario.
- Y tiene autoridad sobre su cuerpo, la iglesia.
- Y tiene autoridad sobre cada alma en el universo, cada momento y cada segundo de cada vida vivida, ahora o anteriormente, o por siempre y para siempre, en cualquier parte del universo.
Él tiene toda autoridad. Jesús tiene toda autoridad. Y es por eso que tiene derecho a decir: "Id a todas partes”. Mateo 28:18 es la orden de allanamiento para irrumpir en otras culturas. Casi nadie en Estados Unidos cree que tengamos una orden para hacer esto actualmente. Esto es algo masiva y políticamente incorrecto de hacer — es decir, la evangelización mundial. Pero tenemos una orden. Tenemos una orden. No hacemos este tipo de cosas sin una orden judicial. No entras en la cultura o a la casa de alguien y dices: "Jesús es el Señor de esta casa; Jesús es el Señor de esta cultura”, sin una orden. ¿Cuál es esa orden? Mateo 28:18 es la orden: "He muerto. He resucitado. He triunfado sobre todos mis enemigos. Tengo toda autoridad en el cielo. Tengo toda autoridad en la tierra. Id”.
Él Da y Él Quita
Salta al versículo 20 para ver no sólo la gran afirmación, sino el amoroso consuelo: “Y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días [literalmente, todos los días], hasta el fin del mundo”. Esto consta de tres partes. Los llamo identificación, continuidad y duración. Esas son las tres partes al final del versículo 20.
¿A qué me refiero con identificación? Quiero decir: ¿Por favor, por un momento, podrías pedirle al Señor que revele a tu corazón lo que has leído, que Aquel que ha prometido nunca dejarte y estar siempre contigo, es Aquel que tiene toda autoridad en el universo? ¿Podrías en este momento, por favor, susurrar una oración en tu corazón? Yo estoy susurrando una ahora mismo para que Dios te revele lo que esto significa. Señor, solo hazlo. ¿Puedes venir y unir estos dos versículos? Señor, tienes toda autoridad en el universo, todo el poder, todo el derecho, el derecho y el poder de hacer lo que quieras en cada área de la vida, cada cultura, cada pueblo, cada religión, el derecho y el poder de ser Señor y Rey. Le has dicho a tu gente, “Yo siempre estaré con vosotros hasta el fin”. Amigos, ¿lo entienden? Aquel que dijo: "Yo siempre estaré con vosotros”, es Él. Esa es la identificación.
La continuidad se encuentra en la palabra siempre o en todos los días. Y no solo me refiero al período de tiempo, sino al tiempo ininterrumpido. ¿Entiendes el punto? Él no se va de vacaciones los lunes. Los pastores piensan que Él se va de vacaciones los lunes, por lo que se deprimen y se desaniman el lunes por la mañana. “¿Dónde está Dios?” Bueno, la respuesta es esta: tan cerca como tu piel, porque él no rompe su palabra. Él no rompe su palabra. No me importa lo deprimente que sea el día, Jesús no miente. “Siempre estaré con vosotros”. Oscuro, brillante, arriba, abajo, malo, bueno, muerte, vida — “Siempre estaré con vosotros”. Hebreos 13:5 (LBLA): "Sea vuestro carácter sin avaricia, contentos con lo que tenéis, porque Él mismo ha dicho: Nunca te dejare ni te desamparare".
Aunque Él da y Él quita
Dios a sus hijos nunca abandona;
Su único propósito amoroso
Para preservarlos, puros y santos.
Los suecos tienen una buena teología. “Aunque Él da y Él quita, Dios a sus hijos nunca abandona".
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