Dones espirituales: una implicación para la oración sin respuesta

De Libros y Sermones Bíblicos

Primero, recordemos algunas verdades acerca de los dones espirituales de 1 Corintios 12. Entonces notaremos una simple implicación para la oración sin respuesta.

1. Dios quiere que sepamos acerca de los dones espirituales.

-En cuanto a los dones espirituales, no quiero, hermanos, que seáis ignorantes.- (1 Corintios 12:1).

2. Las verdades objetivas acerca de Jesús gobiernan las experiencias espirituales subjetivas.

- Por tanto, os hago saber que nadie hablando por el Espíritu de Dios, dice: Jesús es anatema; y nadie puede decir: Jesús es el Señor, excepto por el Espíritu Santo.- (1 Corintios 12:3).

3. Los diferentes cristianos tienen diferentes poderes espirituales que les da el Espíritu Santo.

-Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo.- (1 Corintios 12:4).

4. Por ejemplo, estos diferentes poderes espirituales incluyen los siguientes:

-sabiduría… conocimiento… fe….. milagros…. profecía…. discernimiento de espíritus…. lenguas…. interpretación de lenguas.- (1 Corintios 12: 8-10)

5. El Espíritu de Dios es soberano sobre cuándo y a quién da tales poderes.

-…todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, distribuyendo individualmente a cada uno según la voluntad de Él.- (1 Corintios 12:11)

6. El objetivo de todos los dones es el bien común de la iglesia.

-Pero a cada uno se le da la manifestación del Espíritu para el bien común.- (1 Corintios 12:7).

7. La variedad de regalos es como la variedad de nuestras partes del cuerpo, como el ojo y la oreja, la mano y el pie.

-Porque el cuerpo no es un solo miembro, sino muchos.- (1 Corintios 12:14).

8. Por lo tanto, si no se utiliza un poder espiritual, es como si el cuerpo humano no oyese.

- Si todo el cuerpo fuera ojo, ¿qué sería del oído? Si todo fuera oído, ¿qué sería del olfato?- (1 Corintios 12:17).

9. Por lo tanto, debemos aprovechar los poderes espirituales que Dios nos da a través de los demás.

- Y el ojo no puede decir a la mano: No te necesito; ni tampoco la cabeza a los pies: No os necesito.- (1 Corintios 12:21).

Ahora considere las implicaciones de esto para la oración sin respuesta. Hay más de una razón por la que podemos orar por las cosas y, sin embargo, no recibirlas. Las razones pueden incluir 1) porque no confiamos en Dios (Santiago 1:6); 2) porque la respuesta no glorificaría a Cristo y nos santificaría tanto como otra cosa (2 Corintios 12:8–10); 3) porque la respuesta viene más tarde de lo que pensamos (José esperó 13 años antes de ver la razón de sus aflicciones, Génesis 37–50).

Pero aquí hay una razón en la que quizás no pensemos muy a menudo. Dios puede tener la intención de darnos la bendición que anhelamos no directamente en respuesta a la oración, sino indirectamente en respuesta a la oración, a través del don espiritual de otro creyente. Y la razón por la que no recibimos la bendición es que no aprovechamos el poder que Dios pretende canalizar a través de los dones de su pueblo.

Por ejemplo, los dones que Pablo menciona incluyen sabiduría, curaciones y milagros. Esto implica que Dios pretende que a veces la sabiduría y la sanación y otros tipos de milagros entren en nuestra vida a través de otros creyentes que nos ministran. Si esto no fuera cierto, no tendría sentido en los dones espirituales. Son una manera en que Dios produce el "bien común" de la iglesia.

Si oramos y oramos por algún cambio que queremos ver, pero nunca consideramos buscar el ministerio de un compañero creyente, somos como el ojo que dice a la mano, -No os necesito.- (1 Corintios 12:21).

Así que en sus pequeños grupos (que es el lugar más natural para que ese ministerio suceda), busquen la plenitud del- bien común- (1 Corintios 12:7), y ministrar el uno al otro —y tratar de ser ministrados— de esta manera.

Buscando toda su plenitud contigo,

Pastor John