Dios No Es Aburrido

De Libros y Sermones Bíblicos

Una meditación Sobre la Imaginación

El martes 25 de febrero, hablé en [la Universidad de] Northwestern College como parte de su celebración de un año de duración, cuando celebraban su aniversario de 100 años. El titulo del mensaje era "La Supremacía de Dios en la Vida de la Mente.” Una capacidad de la mente en que me enfocaba era la imaginación. Aplica a todos que tiene una mente. Esto es lo que dije.

Una de las obligaciones grandes de la menta Cristiana es la imaginación. No es la única cosa que hace la mente. La mente observa. La mente analiza y organiza. La mente memoriza. Pero la imaginación es diferente. No observa ni analiza lo que esta allí; imagina lo que no se ve pero tal vez haya allí, y puede explicar lo que hay (en el caso de los descubrimientos científicos). O imagina una manera nueva de decir lo que hay, en la cual nadie lo ha dicho antes (en el caso de la escritura creativa y la música y el arte.)

Digo que la imaginación es una obligación Cristiana por dos razones. El primero es que no se puede aplicar la regla de oro de Jesús sin ella. Él dijo, "todo cuanto queráis que os hagan los hombres, así también haced vosotros con ellos" (Mateo 7:12). Debemos imaginarnos en su lugar e imaginar como nos gustaría que nos hicieran. Compassionate, sympathetic, helpful love hangs much on the imagination of the lover.

La otra razón por la cuál digo que la imaginación es una obligación Cristiana es cuando una persona habla o escribe o canta o pinta sobre la verdad asombrosa de una manera aburrida, es probablemente un pecado. La supremacía de Dios en la vida de la mente no está honrada cuando Dios y su mundo increíble están observados verdaderamente, analizados debidamente, y comunicados aburridamente, La imaginación es la clave de matar al aburrimiento. Debemos imaginar maneras de decir la verdad por lo que realmente es. Y no es aburrido. El mundo de Dios – todo – repica con maravillas. La imaginación inventa nuevas palabras, nuevos imagines, nuevas metáforas, nuevas ilustraciones, nuevas relaciones para decir la antigua, gloriosa verdad. La imaginación es la facultad de la mente que Dios nos ha dado para comunicar lo hermoso de su hermosura.

La imaginación puede ser el trabajo más difícil de la menta humana. Y tal vez lo más parecido a Dios. Es lo más cerca que lleguemos a crear de algo de nada. Cuando hablamos de la verdad Hermosa, debemos pensar en un patrón de palabras, quizás un poema. Debemos concebir algo que nunca ha existido antes y no existe ahora en cualquier mente humana. Debemos pensar en una analogía o metáfora o ilustración que no tiene existencia. La imaginación tiene que hacer un gran esfuerzo para verlo en nuestra mente, cuando no está allí. Debemos crear combinaciones de palabras y música que no ha existido antes. Todo esto hacemos, porque somos parecidos a Dios y porque él es infinitamente digno de siempre-nuevo palabras y canciones.

Una universidad – o una iglesia – dedicado a la supremacía de Dios en la vida de la menta cultivará muchas imaginaciones fértiles y unas pocas gran imaginaciones. Y O, ¡cuánto necesita el mundo unas mentes enamorados de Dios que pueden decir las grandes cosas de Dios y cantar las grandes cosas de Dios y tocar las grandes cosas de Dios en maneras que nunca se había dicho o cantado o tocado antes!

La imaginación es como un musculo. Se fortalece mientras se flexiona. Y hay que flexionarse. No usualmente se pone a sí mismo a actuar solo. Ella atiende la voluntad. La imaginación es contagiosa. Cuando estás alrededor de alguien (vivo o muerto) que la usa mucho, sueles usarla también. Así que les sugiero que pases tiempo con alguna gente (sobre todo poetas muertos) quienes están llenos de imaginación, y que haces un gran esfuerzo en pensar una nueva manera de decir una antigua verdad. Dios es digno. “O, cante al Señor una nueva canción” – o dibujo, o poema, o figura retorica.

Huyéndome contigo del pecado de gente aburrida con Dios,

Pastor John