¿Cómo Debemos Ministrar a la Gente Después del Terrorismo de las Torres Gemelas el 11 de Septiembre, 2001?

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English: How Shall We Minister to People After the World Trade Tower Terrorism of September 11, 2001?

© Desiring God

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Por John Piper sobre Terrorismo

Traducción por Desiring God


21 maneras de consolar a los que sufren

En la mañana del 11 de Septiembre 2001, los terroristas secuestraron a por lo menos tres aviones comerciales y los estrellaron con ambas torres gemelas de 110 pisos en la ciudad de Nueva York, y con el Pentágono (Ministerio de Defensa) en la capital de los EE.UU., Washington, D.C. Dentro de una hora ambas torres se cayeron por completo.

Mientras que escribo, nadie se atreve a estimar la pérdida de vida. Cincuenta mil personas trabajaban en las torres cada mía, además de la gente en los aviones y los cientos de personas tratando de ayudar cuando las torres se cayeron. El impacto personal y nacional y económico es incalculable. La nación está en choque.

Escribí la mayoría de lo que sigue en respuesta a la tragedia que ocurrió en Littleton, Colorado, en Abril del 1999, cuando dos estudiantes mataron a trece personas en la escuela de Columbine y luego se dispararon a sí mismos. La magnitud del acto de ayer es cinco mil veces superior a la de Littleton. Mi meta en escribir fue primordialmente ayudar a los ancianos de mi propia iglesia a ministrar a nuestra gente. Lo reviso y lo publico de nuevo en la esperanza de que otros pueden ser ayudados a amar a la gente y honrar a Cristo en este momento oscuro y pesado de temblor y llanto.

¿Qué diremos de estos eventos para honrarle a Cristo y ministrar a la gente para su bien? Nuestra primera decisión como iglesia fue organizar tres reuniones. El lema de estas reuniones es: “Tristeza, Auto-humillación, y Esperanza Firme en nuestro Salvador y Rey, Jesucristo.” Puedes leer en lo que sigue por qué todos los tres énfasis son cruciales – la tristeza, la auto-humillación, y la esperanza firme. Verás también por qué es tan importante afirmar en tiempos como éste que Jesucristo es el Salvador y el Rey.

Espero que esto servirá como un tipo de recurso bíblico de verdad teológica y cuidado pastoral. Que el Señor fortalezca sus manos y corazones en este momento crucial de necesidad.

Contenido

1. Orar. Pídele a Dios que te ayude a ti y a los que tú quieres servir. Pídele sabiduría y compasión y fuerza y una palabra propicia. Pídele que los que están sufriendo puedan buscarle a Dios como su ayuda y esperanza y sanación y fuerza. Pídele que tu boca sea una fuente de vida.

Santiago 1:5. “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.”

Deuteronomio 32:2. “Goteará como la lluvia mi enseñanza; Destilará como el rocío mi razonamiento; Como la llovizna sobre la grama, y como las gotas sobre la hierba.”

Proverbios 13:14. “La ley del sabio es manantial de vida, Para apartarse de los lazos de la muerte.”

2. Sentir y expresar empatía con los que tienen el mayor dolor por causa de esta gran maldad y pérdida; llorad con los que lloran.

Eclesiastés 3:1, 4-5. “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora… tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar… tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar.”

Romanos 12:15. “Gozaos con los que se gozan; llorad con los que lloran.”

3. Sentir y expresar compasión por las circunstancias trágicas de tantos seres queridos y amigos que han perdido más de lo que jamás pudieron haber estimado.

Juan 11:33-35. “Jesús entonces, al verla llorando, y a los judíos que la acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu y se conmovió, y dijo: ¿Dónde le pusisteis? Le dijeron: Señor, ven y ve. Jesús lloró.”

Lucas 19:41-44. “Y cuando llegó cerca de la ciudad, al verla, lloró sobre ella, diciendo: !!Oh, si también tú conocieses, a lo menos en este tu día, lo que es para tu paz! Mas ahora está encubierto de tus ojos. Porque vendrán días sobre ti, cuando tus enemigos te rodearán con vallado, y te sitiarán, y por todas partes te estrecharán, y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, por cuanto no conociste el tiempo de tu visitación.”

Lucas 7:11-17. “Aconteció después, que él iba a la ciudad que se llama Naín, e iban con él muchos de sus discípulos, y una gran multitud. Cuando llegó cerca de la puerta de la ciudad, he aquí que llevaban a enterrar a un difunto, hijo único de su madre, la cual era viuda; y había con ella mucha gente de la ciudad. Y cuando el Señor la vio, se compadeció de ella, y le dijo: No llores. Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban se detuvieron. Y dijo: Joven, a ti te digo, levántate. Entonces se incorporó el que había muerto, y comenzó a hablar. Y lo dio a su madre. Y todos tuvieron miedo, y glorificaban a Dios, diciendo: Un gran profeta se ha levantado entre nosotros; y: Dios ha visitado a su pueblo. Y se extendió la fama de él por toda Judea, y por toda la región de alrededor.”

4. Tomar tiempo y tocar, si es posible, y dar cuidado tierno a los heridos en cuerpo y alma.

Mateo 8:14-15. “Vino Jesús a casa de Pedro, y vio a la suegra de éste postrada en cama, con fiebre. Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.”

Marcos 1:40-41. “Vino a él un leproso, rogándole; e hincada la rodilla, le dijo: Si quieres, puedes limpiarme. Y Jesús, teniendo misericordia de él, extendió la mano y le tocó, y le dijo: Quiero, sé limpio.”

Lucas 10:30-37. “Respondiendo Jesús, dijo: Un hombre descendía de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de ladrones, los cuales le despojaron; e hiriéndole, se fueron, dejándole medio muerto. Aconteció que descendió un sacerdote por aquel camino, y viéndole, pasó de largo. Asimismo un levita, llegando cerca de aquel lugar, y viéndole, pasó de largo. Pero un samaritano, que iba de camino, vino cerca de él, y viéndole, fue movido a misericordia; y acercándose, vendó sus heridas, echándoles aceite y vino; y poniéndole en su cabalgadura, lo llevó al mesón, y cuidó de él. Otro día al partir, sacó dos denarios, y los dio al mesonero, y le dijo: Cuídamele; y todo lo que gastes de más, yo te lo pagaré cuando regrese. ¿Quién, pues, de estos tres te parece que fue el prójimo del que cayó en manos de los ladrones? Él dijo: El que usó de misericordia con él. Entonces Jesús le dijo: Ve, y haz tú lo mismo.”

5. Ofrecer la promesa que Dios sustentará y ayudará a los que se aferran a Él para misericordia y confían en su gracia. Él te fortalecerá para los días imposibles que vienen, a pesar de toda la oscuridad.

Salmo 34:18. “Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu.”

Isaías 41:10. “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”

Salmo 23:4. “Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento.”

2 Corintios 1:3-4. “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.”

2 Corintios 1:8-9. “Porque hermanos, no queremos que ignoréis acerca de nuestra tribulación que nos sobrevino en Asia; pues fuimos abrumados sobremanera más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que aun perdimos la esperanza de conservar la vida. Pero tuvimos en nosotros mismos sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos.”

6. Afirmar que Jesucristo experimentó la hostilidad de los hombres y sabe lo que es ser torturado y abandonado injustamente, y pasar por pérdida abrumadora, y luego ser matado, así que él es un mediador compasivo por nosotros con Dios.

Hebreos 4:15-16. “Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado [o "probado" la cual hace la aplicación más grande] en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.”

Isaías 53:3-6. “Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos. Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.”

7.Declarar que este homicidio fue una gran maldad, y que la ira de Dios se enciende grandemente por la destrucción injustificada de vida humana creada a su imagen.

Éxodo 20:13. “No matarás.”

Génesis 9:5-6. “Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre. El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre.”

Deuteronomy 29:24-25. "All the nations will say, 'Why has the LORD done thus to this land? Why this great outburst of anger?' Then men will say, 'Because they forsook the covenant of the LORD, the God of their fathers, which He made with them when He brought them out of the land of Egypt.'"

8. Reconocer que Dios ha permitido este gran brote de pecado contra su voluntad revelada, y que nos sabemos todas las razones por las cuales él permitiría tal cosa ahora, cuando él tiene el poder para pararlo.

Deuteronomio 29:29. “Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley.”

Romanos 11:33-36. “!!Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! !!Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? ¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado? Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.”

9. Expresar la verdad que Satanás es una realidad masiva en el universo que conspira con nuestro propio pecado y carne y mundo para herir a la gente y motivar a la gente a herir a otros, pero enfatizar que Satanás es bajo el control de Dios.

Job 1:6, 12, 21-22; 2:6-10. “Un día vinieron a presentarse delante de Jehová los hijos de Dios, entre los cuales vino también Satanás… Dijo Jehová a Satanás: He aquí, todo lo que tiene [Job] está en tu mano; solamente no pongas tu mano sobre él. Y salió Satanás de delante de Jehová…[Después de perder todas sus posesiones y sus diez hijos, Job dice:] Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito. En todo esto no pecó Job, ni atribuyó a Dios despropósito alguno…[Después de una segunda reunión en el cielo] Jehová dijo a Satanás: He aquí, él está en tu mano; mas guarda su vida. Entonces salió Satanás de la presencia de Jehová, e hirió a Job con una sarna maligna desde la planta del pie hasta la coronilla de la cabeza. Y tomaba Job un tiesto para rascarse con él, y estaba sentado en medio de ceniza. Entonces le dijo su mujer: ¿Aún retienes tu integridad? Maldice a Dios, y muérete. Y él le dijo: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, has hablado. ¿Qué? ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios.”

Job 42:2, 11. “Yo conozco que todo lo puedes, y que no hay pensamiento que se esconda de ti…Y vinieron a él todos sus hermanos y todas sus hermanas, y todos los que antes le habían conocido, y comieron con él pan en su casa, y se condolieron de él, y le consolaron de todo aquel mal que Jehová había traído sobre él; y cada uno de ellos le dio una pieza de dinero y un anillo de oro.”

Lucas 22:31-32. “Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos.”

2 Corintios 12:7-9. “Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera; respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí. Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.”

Comparar las siguientes dos perspectivas sobre la causa de la muerte de Jesucristo.

Lucas 22:3-4. “Y entró Satanás en Judas, por sobrenombre Iscariote, el cual era uno del número de los doce; y éste fue y habló con los principales sacerdotes, y con los jefes de la guardia, de cómo se lo entregaría.”

Hechos 4:27-28. “Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera.”

10. Expresar que estos terroristas se rebelaron contra la voluntad revelada de Dios y no amaban a Dios ni le confiaban ni buscaban en Dios su refugio y fuerza y tesoro, sino que le despreciabann a Él y a sus caminos.

2 Tesalonicenses 3:1-2. “Por lo demás, hermanos, orad por nosotros…para que seamos librados de hombres perversos y malos; porque no es de todos la fe.”

Gálatas 5:6. “Porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor.”

Gálatas 5:16. “Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.”

Santiago 4:1-4. “¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros? Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís. Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites. !!Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.”

11. Ya que la rebelión contra Dios fue la raíz de este acto de asesinato, que todos tengamos cuidado de tal rebelión en nuestros propios corazones, y apartarnos de ella, y abrazar la gracia de Dios en Cristo, y renunciar los mismos impulsos que causaron esta tragedia.

Proverbios 3:5-6. “Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas.”

Salmo 9:10. “En ti confiarán los que conocen tu nombre, por cuanto tú, oh Jehová, no desamparaste a los que te buscaron.”

Salmo 56:3. “En el día que temo, yo en ti confío.”

12. Apuntar los vivos a los asuntos trascendentales del pecado y arrepentimiento en nuestros propios corazones y la necesidad urgente de estar en paz para con Dios por medio de su provisión misericordiosa de perdón en Cristo, para que un destino peor que la muerte no nos alcance.

Lucas 13:1-5. “En este mismo tiempo estaban allí algunos que le contaban acerca de los galileos cuya sangre Pilato había mezclado con los sacrificios de ellos. Respondiendo Jesús, les dijo: ¿Pensáis que estos galileos, porque padecieron tales cosas, eran más pecadores que todos los galileos? Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. O aquellos dieciocho sobre los cuales cayó la torre en Siloé, y los mató, ¿pensáis que eran más culpables que todos los hombres que habitan en Jerusalén? Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.”

Apocalipsis 9:18-21. [Como un juicio de Dios] “por estas tres plagas fue muerta la tercera parte de los hombres; por el fuego, el humo y el azufre que salían de su boca…Y los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni aun así se arrepintieron de las obras de sus manos, ni dejaron de adorar a los demonios, y a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar; y no se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías, ni de su fornicación, ni de sus hurtos.”

Apocalipsis 16:8-9. “El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado quemar a los hombres con fuego. Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria.”

13. Acordarse que incluso los que confían en Cristo pueden ser matados como los miles que lo fueron en Nueva York y Washington, pero eso no significa que han sido abandonados por Dios o no amados por Dios aun en esas horas agonizantes de sufrimiento. El amor de Dios vence, incluso en medio de la calamidad.

Romanos 8:35-39. “¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada? Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; Somos contados como ovejas de matadero. Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.”

14.Combinar el llanto del corazón con la confianza inquebrantable en la bondad y soberanía de Dios, quien reina sobre el pecado y los planes de la gente rebelde.

Lamentaciones 3:32-33. “Antes si aflige, también se compadece según la multitud de sus misericordias. Porque no aflige ni entristece voluntariamente a los hijos de los hombres.”

Génesis 45:7. [José dijo a sus hermanos que le habían vendido pecaminosamente hacia Egipto] “Dios me envió delante de vosotros, para preservaros posteridad sobre la tierra, y para daros vida por medio de gran liberación.”

Génesis 50:20. [José dijo a sus hermanos temerosos] “Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo.”

Otros pasajes acerca de la soberanía absoluta de Dios sobre todas las cosas: Efesios 1:11; Isaías 46:9-10; Lamentaciones 3:37; Amós 3:6; Proverbios 16:33; Éxodo 4:11; 1 Samuel 2:6-7; 2 Samuel 12:15-18; Juan 9:2-3; Santiago 4:15; 1 Pedro 3:17; 4:19; Mateo 10:29.

15.Confiar en Dios para su habilidad de hacer lo humanamente imposible, y llevarte al otro lado de esta pesadilla y, de alguna forma inescrutable, traer bien de ella.

Romanos 8:28. “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.”

Lamentaciones 3:21-24. “Esto recapacitaré en mi corazón, por lo tanto esperaré. Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad. Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto, en él esperaré.”

2 Corintios 1:8-9. “Porque hermanos, no queremos que ignoréis acerca de nuestra tribulación que nos sobrevino en Asia; pues fuimos abrumados sobremanera más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que aun perdimos la esperanza de conservar la vida. Pero tuvimos en nosotros mismos sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos.”

2 Corintios 4:17. “Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria.”

16. Explicar, cuando el tiempo es apropiado y tienen la capacidad de pensar claramente, que uno de los misterios de la grandeza de Dios es que Él ordena que algunas cosas sucedan, de las cuales Él prohíbe y desaprueba.

El ejemplo más claro es su ordenanza que su Hijo fuera matado.

Hechos 4:27-28. “Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera.”

Véase el apéndice titulado “¿Hay Dos Voluntades en Dios? La Elección Divina y el Deseo de Dios que Todos Sean Salvos,” en Los Deleites de Dios, pp. 313-340.

17. Expresar su amor personal por la soberanía de Dios como la base de toda tu esperanza mientras que enfrentas las imposibilidades humanas de la vida. El cumplimiento mismo de las promesas del Nuevo Pacto de nuestra salvación y preservación dependen de la soberanía de Dios sobre las voluntades humanas rebeldes.

Marcos 10:24-27. “Los discípulos se asombraron de sus palabras; pero Jesús, respondiendo, volvió a decirles: Hijos, !!cuán difícil les es entrar en el reino de Dios, a los que confían en las riquezas! Más fácil es pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. Ellos se asombraban aun más, diciendo entre sí: ¿Quién, pues, podrá ser salvo? Entonces Jesús, mirándolos, dijo: Para los hombres es imposible, mas para Dios, no; porque todas las cosas son posibles para Dios.”

Jeremías 32:40. “Y haré con ellos pacto eterno, que no me volveré atrás de hacerles bien, y pondré mi temor en el corazón de ellos, para que no se aparten de mí.”

Hebreos 13:20-21. “Y el Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del pacto eterno, os haga aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo que es agradable delante de él por Jesucristo; al cual sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.”

18. Contar con Dios como su único tesoro duradero, porque él es el único seguro y estable en el universo.

Salmo 73:25-26. “¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra. Mi carne y mi corazón desfallecen; Mas la roca de mi corazón y mi porción es Dios para siempre.”

19. Recordarles a todos que el vivir es Cristo y el morir es ganancia.

Filipenses 1:21-23. “Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia. Mas si el vivir en la carne resulta para mí en beneficio de la obra, no sé entonces qué escoger. Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor.”

2 Corintios 5:7-9. “Porque por fe andamos, no por vista; pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes al Señor. Por tanto procuramos también, o ausentes o presentes, serle agradables.”

20. Orar que Dios incline sus corazones a su Palabra, abra sus ojos a sus maravillas, una sus corazones a temerle, y les contente con su amor.

Salmo 119:36. “Inclina mi corazón a tus testimonios, y no a la avaricia.”

Salmo 119:18. “Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley.”

Salmo 86:11. “Afirma mi corazón para que tema tu nombre.”

Salmo 90:14. “De mañana sácianos de tu misericordia, y cantaremos y nos alegraremos todos nuestros días.”

21.En el tiempo propicio, sonad la trompeta que toda esta buena noticia está intencionado por Dios para librarnos al servicio radical y sacrificial con el fin de la salvación de los hombres y la gloria de Cristo. Ayúdales a ver que un mensaje de toda esta miseria es el de demostrarnos que la vida es corta y frágil y seguida por la eternidad, y que las ambiciones pequeñas, centradas en el hombre, son trágicas.

Hechos 20:24. “Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.”

Tito 2:14. “[Cristo] se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.”

Filipenses 1:21. “El vivir es Cristo.”


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