Escrito sobre el corazón
De Libros y Sermones BÃblicos
Por Ligonier Ministries Staff
sobre Los Pactos
Una parte de la serie Tabletalk
Traducción por David Acuña Astorga
"Pondré mis leyes en las mentes de ellos, y las escribiré sobre sus corazones, y yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo." (Hebreos 8:10b).
Hebreos 8:10.
Los profetas del Antiguo Testamento esperaban con ansias un nuevo pacto que renovara, satisficiera y transcendiera el antiguo pacto. Esperaban con ansias el nuevo pacto, pues éste realizaría la redención que Dios prometió a su pueblo y no sólo apuntaría a la redención como lo hacía el anterior.
Algunas personas dentro del destinatario original de la epístola a los Hebreos se sentían tentados de pensar que el nuevo pacto todavía no había llegado. Aunque habían confesado a Cristo como el Mediador del nuevo pacto, algunos consideraron abandonar esta confesión a favor del antiguo pacto. Por eso, el autor de Hebreos escribió para recordarle a sus destinatarios la grandeza del nuevo pacto que había llegado en la persona y en las obras de Jesucristo.
En el capítulo 8, el autor cita una larga promesa del profeta Jeremías sobre el nuevo pacto. Estas palabras son un recordatorio de que el antiguo pacto no duraría para siempre y de que el nuevo pacto sería mejor que el antiguo. Por eso, caería condenación sobre quien abandonara el nuevo pacto.
En este punto, examinaremos la cita de Jeremías que encontramos en Hebreos 8 y exploraremos las maravillas del nuevo pacto. Ayer, observamos brevemente los versículos 8 y 9 del capítulo 8 de esta espístola y aprendimos en qué se diferencia el nuevo pacto del antiguo. Hace algunos días, notamos que la diferencia no yace en el hecho de que el antiguo y el nuevo pacto prometen cosas diferentes. Más bien, la diferencia es que tenemos una revelación más completa bajo el nuevo pacto. Es más, con el nuevo pacto, las promesas ya se están cumpliendo, mientras que con el antiguo, sólo tenemos una esperanza de que se cumplan. Esta esperanza imprecisa apuntaba a la necesidad de perfección, pero no perfeccionó a nadie.
Sin embargo, a diferencia del antiguo, el nuevo pacto traerá perfección. La ley de Dios estará escrita sobre los corazones y las mentes, permitiéndole a los creyentes vivir como el pueblo de Dios (versículo 10). El mandato para que la gente tenga la Ley en sus corazones (Deuteronomio 6:6) se realizará debido a que la Ley, realmente, existirá dentro de sus corazones. Mañana, veremos cómo este hecho soporta todos los otros beneficios que vienen con el nuevo pacto. El viernes, exploraremos cómo deben entender los creyentes de hoy la escritura de la Ley en sus corazones.
Coram Deo.
La Ley escrita en nuestros corazones revela dos cosas importantes. Primero, nos recuerda que las cosas más esenciales de la Ley no son meras observaciones exteriores, sino que materias del corazón. Segundo, sabemos que, ya que Dios debe ser el que escribe en nuestros corazones, no podemos hacerlo nosotros mismos. Gracias a Dios porque Él ha cambiado nuestros corazones por Su gracia.
Pasajes adicionales para estudiar.
Jeremías 4:4.
Ezequiel 11:19–20.
2 Corintios 3:7–11.
Colosenses 2:11–12.
Vota esta traducción
Puntúa utilizando las estrellas