¿Serán juzgados los Estados Unidos?

De Libros y Sermones Bíblicos

La razón por la que el evangelio de Jesús es precioso es porque ofrece un gozoso rescate de un juicio terrible. La Biblia habla del "furor de la ira del Dios Todopoderoso" (Apocalipsis 19:15). Y la Biblia se regocija en que "Jesús nos libra de la ira venidera" (1 Tesalonicenses 1:10). Es el mismo Dios Padre quien envió a Jesús para rescatarnos de su ira: "Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros... Por lo tanto, seremos salvos por medio de él de la ira de Dios" (Romanos 5:8-9).

Contenido 1 Cómo hablan las Escrituras del juicio de Dios 2 ¿Juzga Dios a las naciones hoy en día ? 3 La secuencia de pecado en Levítico 18 4 ¿En cincuenta años?

Cómo hablan las Escrituras del juicio de Dios

Hay por lo menos cinco maneras en las que la Biblia habla acerca del juicio de Dios.

1 . Como juicio, Dios entrega al impío para ser endurecido en esta vida.

"La ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad... Por tanto, Dios los entregó a la inmundicia en las concupiscencias de sus corazones" (Romanos 1:18, 24; véase Romanos 11:7-8).

2 . Como juicio, Dios castiga a las naciones de la historia, tanto a Israel como a las demás.

"Tú [Jerusalén] serás afrenta, escarnio, escarmiento y objeto de espanto para las naciones que están alrededor de ti, cuando yo haga en ti juicios con furor e indignación y con reprensiones llenas de ira" (Ezequiel 5:15).

"Mi espada; descenderá sobre Edom para juicio, y sobre el pueblo que he reservado para destrucción" (Isaías 34:5).

3 . Habrá un juicio final de todas las personas al final de la historia.

"Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios" (Romanos 2:5).

4 . La muerte de Jesús fue el juicio punitivo final de Dios sobre todos los que creen en Cristo.

"De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra y cree al que me envió tiene vida eterna, y no vendrá a condenación, sino que ha pasado de muerte a vida" (Juan 5:24).

"Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado, y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne" (Romanos 8:3).

5 . Las personas a veces son juzgadas en esta vida, pero, para los cristianos, todos los juicios son disciplinarios, no destructivos.

"Al momento, un ángel del Señor lo hirió (a Herodes), por cuanto no dio la gloria a Dios; y expiró comido de gusanos" (Hechos 12:23).

"Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos han muerto... pero siendo nosotros juzgados, somos castigados por el Señor para que no seamos condenados con el mundo" (1 Corintios 11:30, 32).

Esto significa que todos debemos vivir vidas sobrias, de fe, santidad, y serio gozo. "Si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación" (1 Pedro 1:17).

¿Juzga Dios a las naciones hoy en día ?

¿Qué pasa con el juicio a las naciones hoy? ¿Qué pasa con los Estados Unidos? ¿Hay señales bíblicas de cómo Dios trata hoy con las naciones?

En primer lugar, la Biblia describe a Dios como soberano sobre las naciones, gobernándolas para sus propósitos. Esto incluye a los pueblos étnicos, así como los estados políticos que surgen en torno a ellos: "El Reino pertenece al Señor, y él regirá las naciones" (Salmos 22:28).

En segundo lugar, la Biblia describe la relación de Dios para con las naciones como de tolerancia hacia el pecado hasta un punto, y luego trayendo calamidad. Dios le dijo a Abram que sus descendientes pasarían 400 años en un país extranjero como esclavos (Génesis 15:13). Entonces Dios "traería juicio sobre la nación a la que sirven" (Génesis 15:14). ¿Por qué esa demora tan prolongada antes de que Dios le diera la tierra prometida a Israel? Dios responde, "Porque la maldad de los amorreos aun no ha llegado al colmo" (Génesis 15:16).

En otras palabras, había un nivel de corrupción que debía ser alcanzado entre las naciones de la tierra prometida que justificara el juicio de Dios sobre ellos cuando Israel volviera de Egipto.

Así que Dios le enseñó a su pueblo a no decir, "Es a causa de mi justicia me ha traído Jehová a poseer esta tierra." Más bien, "es por la impiedad de estas naciones que Jehová las arroja de delante de ti" (Deuteronomio 9:4).

En tercer lugar, numerosos textos en la Biblia mencionan los tipos de iniquidad que Dios tiene en mente cuando dice, "la maldad de estas naciones". La amenaza de juicio sobre Israel y otras naciones es causada por los corazones arrogantes (Isaías 2:11; 3:15; 13:11), la idolatría (Jeremías 16:18, Ezequiel 23:20), el soborno (Isaías 1:23), la extorsión (Ezequiel 22:12), y la opresión de los pobres (Isaías 10:2; Malaquías 3:4).

La secuencia de pecado en Levítico 18

Pero hay una notable secuencia de pecados en Levítico 18:20-25 que se parece mucho al progreso de la iniquidad en el mundo occidental moderno. Moisés dice que por estos pecados "las naciones que yo estoy echando de delante de vosotros, se han vuelto impuras, y la tierra se ha convertido en impura, por lo tanto, he castigado su iniquidad, y la tierra vomitará sus moradores" (versículo 25).

¿Qué llevó a las naciones de Canaán a tal punto del juicio? Estos son los pecados a los que se refería Moisés:

1 . El adulterio.

El versículo 20: "No tendrás acto sexual con la mujer de tu prójimo...".

2 . El sacrificio de niños (lo que llamamos aborto).

Versículo 21: "No darás un hijo tuyo para ofrecerlo por fuego a Moloc; no profanarás así el nombre de tu Dios, Yo, Jehová".

3 . Relaciones homosexuales.

El versículo 22: "No te echarás con varón como con mujer; es abominación".

4 . La zoofilia.

El versículo 23: "Con ningún animal tendrás ayuntamiento, haciéndote impuro con él: ...es una perversión".

En Occidente, hemos llegado hasta el punto de aprobar abiertamente el adulterio, el asesinato de niños y el coito homosexual. ¿Seguiremos con la aprobación abierta de la zoofilia? Probablemente. Hace unas semanas, el Huffington Post informó que una mujer encontró en el teléfono de su novio fotos de él teniendo sexo con su perro.

¿En cincuenta años?

Nuestra reacción a esto es probablemente la misma que la reacción que tenía la mayoría de la gente al llamado "matrimonio" homosexual hace cincuenta años. ¿Hay alguna buena razón para dudar que en cincuenta años las leyes contra la zoofilia hayan caído de la misma manera que las leyes contra las relaciones homosexuales cayeron en los últimos años? (Y en cuanto a "matrimonio" se refiere, Wikipedia ya tiene un artículo sobre el matrimonio hombre-animal).

Hay razón para suponer, entonces, que Dios causará la ruina de las naciones que siguen el curso de corrupción de la misma forma en que los cananeos lo hicieron.

Por supuesto, la historia no es una línea recta de cosas inevitables. Dios mismo puede intervenir y conducir a su iglesia a un gran avivamiento de obediencia radical, un gran despertar en los países de Occidente. Él puede hacerlo. Lo ha hecho antes. Debemos orar para que Él lo haga. La venganza es del Señor, no nuestra (Romanos 12:19).

Incluso si la carrera de iniquidad pública continúa, el evangelio de Cristo seguirá siendo el poder de Dios para salvación a todo aquel que cree (Romanos 1:16). Ningún individuo en Cristo tiene que temer el juicio de Dios. Podremos ser asesinados proclamando la santidad bíblica, como dijo Pablo en Romanos 8:36, pero en todas estas cosas seremos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.