La Chequera del Banco de la Fe/7 de Julio
De Libros y Sermones BÃblicos
Línea 1: | Línea 1: | ||
{{info|Faith's Checkbook/July 7}} | {{info|Faith's Checkbook/July 7}} | ||
- | <br>7 de Julio<br>“Cantad alabanzas, oh cielos, y alégrate, tierra; y prorrumpid en alabanzas,<br>oh montes, porque Jehová ha consolado a su pueblo, y de sus pobres<br>tendrá misericordia.” Isaías 49: 13.<br>Son tan dulces los consuelos del Señor, que no sólo los propios santos pueden<br>cantarles, sino que incluso los cielos y la tierra pueden entonar la canción. Se<br>requiere de mucho para hacer que un monte cante; y, sin embargo, el profeta<br>congrega a un notable coro de montes. Él quiere poner a cantar al Líbano y al<br>Sirión, y a los elevados montes de Basán y Moab, a todos ellos, debido a la gracia<br>de Jehová para con Sion, que es Suya. ¿No podemos nosotros también hacer de<br>los montes de la dificultad, y de la prueba y del misterio, y del trabajo se<br>conviertan en ocasiones para alabar a nuestro Dios?<br>“¡Prorrumpid en alabanzas, oh montes!”<br>Esta palabra de promesa, que nuestro Dios tendrá misericordia para con Sus<br>afligidos, contiene todo un repique de campanas. Oigan la música: “¡Cantad!”<br>“¡Alégrate!”<br>“Prorrumpid en alabanzas”. El Señor quiere que Su pueblo sea feliz debido a Su<br>inmutable amor. No quiere que estemos tristes ni recelosos; Él reclama de<br>nosotros la adoración de corazones creyentes. Él no nos puede fallar: ¿por qué<br>habríamos de suspirar o decaer como si fuera a fallarnos? ¡Oh, anhelamos un<br>arpa bien afinada! ¡Oh, anhelamos voces como las de los querubines delante del<br>trono!<br> | + | <br>'''''7 de Julio<br><br>“Cantad alabanzas, oh cielos, y alégrate, tierra; y prorrumpid en alabanzas,<br>oh montes, porque Jehová ha consolado a su pueblo, y de sus pobres<br>tendrá misericordia.” Isaías 49: 13.<br>'''''<br>Son tan dulces los consuelos del Señor, que no sólo los propios santos pueden<br>cantarles, sino que incluso los cielos y la tierra pueden entonar la canción. Se<br>requiere de mucho para hacer que un monte cante; y, sin embargo, el profeta<br>congrega a un notable coro de montes. Él quiere poner a cantar al Líbano y al<br>Sirión, y a los elevados montes de Basán y Moab, a todos ellos, debido a la gracia<br>de Jehová para con Sion, que es Suya. ¿No podemos nosotros también hacer de<br>los montes de la dificultad, y de la prueba y del misterio, y del trabajo se<br>conviertan en ocasiones para alabar a nuestro Dios?<br>“¡Prorrumpid en alabanzas, oh montes!”<br><br>Esta palabra de promesa, que nuestro Dios tendrá misericordia para con Sus<br>afligidos, contiene todo un repique de campanas. Oigan la música: “¡Cantad!”<br>“¡Alégrate!”<br>“Prorrumpid en alabanzas”. El Señor quiere que Su pueblo sea feliz debido a Su<br>inmutable amor. No quiere que estemos tristes ni recelosos; Él reclama de<br>nosotros la adoración de corazones creyentes. Él no nos puede fallar: ¿por qué<br>habríamos de suspirar o decaer como si fuera a fallarnos? ¡Oh, anhelamos un<br>arpa bien afinada! ¡Oh, anhelamos voces como las de los querubines delante del<br>trono!<br> |
Revisión de 00:43 7 ago 2010
Por Charles H. Spurgeon
sobre Vida Devocional
Capítulo 190 del Libro La Chequera del Banco de la Fe
Traducción por Allan Aviles
7 de Julio
“Cantad alabanzas, oh cielos, y alégrate, tierra; y prorrumpid en alabanzas,
oh montes, porque Jehová ha consolado a su pueblo, y de sus pobres
tendrá misericordia.” Isaías 49: 13.
Son tan dulces los consuelos del Señor, que no sólo los propios santos pueden
cantarles, sino que incluso los cielos y la tierra pueden entonar la canción. Se
requiere de mucho para hacer que un monte cante; y, sin embargo, el profeta
congrega a un notable coro de montes. Él quiere poner a cantar al Líbano y al
Sirión, y a los elevados montes de Basán y Moab, a todos ellos, debido a la gracia
de Jehová para con Sion, que es Suya. ¿No podemos nosotros también hacer de
los montes de la dificultad, y de la prueba y del misterio, y del trabajo se
conviertan en ocasiones para alabar a nuestro Dios?
“¡Prorrumpid en alabanzas, oh montes!”
Esta palabra de promesa, que nuestro Dios tendrá misericordia para con Sus
afligidos, contiene todo un repique de campanas. Oigan la música: “¡Cantad!”
“¡Alégrate!”
“Prorrumpid en alabanzas”. El Señor quiere que Su pueblo sea feliz debido a Su
inmutable amor. No quiere que estemos tristes ni recelosos; Él reclama de
nosotros la adoración de corazones creyentes. Él no nos puede fallar: ¿por qué
habríamos de suspirar o decaer como si fuera a fallarnos? ¡Oh, anhelamos un
arpa bien afinada! ¡Oh, anhelamos voces como las de los querubines delante del
trono!
Vota esta traducción
Puntúa utilizando las estrellas