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Por John Piper sobre Humildad
Una parte de la serie 1 Corinthians: The Present Power of Christ Crucified

Traducción por Maria Luisa Davalos

Contenido

1 Corintos 3:18-23

Una de las varias cosas que continuamente profundiza mi confianza de que la Biblia es la Palabra de Dios es su habilidad de poner al desnudo el complejo funcionamiento de la mente y el corazón humanos. La sabiduría psicológica de la Palabra de Dios es inexhaustible. Es siempre más relevante y actualizada que el más nuevo de los paradigmas para la interpretación de desordenes emocionales.

La Comprensión de Pablo sobre el Corazón Humano

El texto de hoy es otro ejemplo de la comprensión que Pablo tiene sobre el funcionamiento complejo y aparentemente contradictorio de mi corazón—y del tuyo.

El Problema de la Vanagloria en Corinto

Recordarán que el principal problema en Corinto con el que Pablo había estado tratando era la vanagloria—gloriarse en los hombres.

Lo vimos en primer lugar en 1:12, "yo soy de Pablo," "yo soy de Apolos," "yo soy de Cefas." Lo vimos denunciando esto explícitamente en 1:29, " . . . a fin de que nadie se jacte en la presencia de Dios." Vimos su alternativa positiva en 1:31, "EL QUE SE GLORIA, QUE SE GLORIE EN EL SEÑOR." Retomó el problema nuevamente en 3:4, "Porque cuando uno dice: Yo soy de Pablo, y otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois simplemente hombres?" Y cierra el capítulo 3 con el mismo tema. Verso 21: "así que ninguno se gloríe en los hombres."

De manera que hay vanagloria en muchas personas en Corinto—la disposición psicológica de ponerse a sí mismo primero como digno de recibir la alabanza de los hombres, o, en su defecto, unirse a un maestro digno para recibir indirectamente algo de los elogios que son para él.

La Triple Fealdad de la Vanagloria

La fealdad de esta disposición es triple:

  1. Está arruinando las almas de aquellos que la tienen porque sus almas fueron hechas para exaltar a Dios y no a los hombres. Es como si un complejo artefacto espacial solar hecho para transmitir distantes ondas de sonido interestelar fuera capturado y puesto en una estación de radio barata para transmitir música rock ranchera todo el día. No es eso para lo que fuimos hechos. La vanagloria es la prostitución del alma humana.
  2. Es dividir el tejido de la vida comunitaria en bandos debido a los celos y contiendas (3:3). El primer acto comunitario que Adán hizo luego de escoger confiar en sí mismo en lugar de confiar en Dios, fue culpar a su esposa, Eva, por el problema en que se habían metido. Y así ha sido desde entonces. El orgullo destruye las relaciones.
  3. Es quitarle la gloria a Dios, porque la gloria que es dada a los hombres debería ser para Dios.
Dos Tipos de Razones para No Gloriarse

De manera que Pablo dice otra vez (pero no por última vez) en el verso 21, " Así que nadie se jacte en los hombres." Y rodea este comando con las razones por las que tal vanagloria debe parar. Da un tipo de razones antes del comando, en los versos 18–20. Da otro tipo de razones luego del comando, en los versos 20b–23. Cuando uno comienza a entender estos dos tipos de razones por las que no debe haber vanagloria y se pregunta cómo se relacionan entre ellas, uno comienza a ver cuán profunda y actualizada es la sabiduría psicológica de Pablo. Analicemos cada una de ellas para ver cómo se relacionan.

Razones Amenazantes por las que no se Deben Gloriar

En primer lugar, en los versos 18–20 Pablo da al menos dos razones por las que debemos dejar de gloriarnos en los hombres, particularmente en la sabiduría de los hombres, ya sea en nosotros mismos o indirectamente en nuestro maestro favorito.

La Sabiduría del Hombre es Insensatez

La primera razón es que la sabiduría del hombre que soporta a la vanagloria humana no es realmente sabiduría, sino insensatez. Los versos 18b–19a: "Si alguno entre vosotros se cree sabio en este siglo, hágase ignorante, para que llegue a ser sabio. Porque la sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios."

Vemos todo esto descrito en el capítulo 1, especialmente en el verso 18: "Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden." Y el verso 25: "Porque lo insensato de Dios es más sabio que los hombres." De manera que si realmente quieres ser sabio, dice Pablo, sabio a los ojos de Dios, debes creer y hacer cosas que para el mundo serán una tontería—que un maestro Judío crucificado es el Señor del universo; y que la vía a la felicidad es la vía al Calvario.

La sabiduría del mundo que soporta a la vanagloria y acentúa la autosuficiencia del hombre no es sabiduría. Así que no te vanaglories en los hombres.

Vanagloriarse en los Hombres Es una Calle Sin Salida

La segunda razón por la que se debe abandonar la vanagloria en los hombres es que ésta es una calle sin salida. El verso 19b (que cita a Job 5:13), "Él prende a los sabios en la astucia de ellos," y (cita del Salmo 94:11), "El Señor conoce los pensamientos de los sabios, que son vanos." En otras palabras, la sabiduría del hombre lo puede llevar a la luna, pero no lo lleva a ninguna parte en lo que es más importante: su relación con Dios. La sabiduría human alimenta al orgullo y el orgullo aleja a las personas de Dios. ¿Y qué hay lejos de Dios? Una trampa y futilidad. Una calle sin salida.

La Raíz de la Vanagloria Que Pablo Está Atacando

Estas son las dos razones para no gloriarse en los hombres que vienen antes del comando en el verso 21a. La sabiduría del mundo no es realmente sabiduría sino insensatez, y es una calle sin salida. Si te preguntas qué es lo que tiene esta sabiduría mundana que la hace insensata y fútil, la respuesta en los versos 18–20 dice que auto-exalta. Se puede ver esto en el verso 18b: "Si alguno entre vosotros se cree sabio en este siglo, hágase ignorante, para que llegue a ser sabio." El problema es que la gente se exalta a si misma pensando que son sabios en este siglo.

En los versos 18–20, la raíz de la vanagloria parece ser un punto de vista engrandecido sobre la propia sabiduría, o talvez la sabiduría de su maestro. Pablo se opone a esto diciendo que uno no es tan sabio como cree, y que su supuesta sabiduría es una calle sin salida.

Una Razón Tranquilizadora para No Vanagloriarse

Esto es muy diferente de lo que vemos en los versos 21b–23. Pablo también da razones para no vanagloriarse luego de este comando, pero parece que la raíz del problema es muy diferente de la raíz mencionada en los versos 18–20.

La razón que Pablo da en el verso 21b para no vanagloriarse es esta: "Porque todo es vuestro." Esto es extraño en un principio. Suena tranquilizador, reconfortante. Pero las razones para no vanagloriarse en el verso 19 y 20 eran amenazantes: "El prende a los sabios en la astucia de ellos." Y: "los pensamientos de los sabios son vanos." El tono que usa es uno de advertencia y alarma.

Pero el tono usado luego del comando de no gloriarse (en v. 21b) es tranquilizador; está lleno de alivio y esperanza.

El primer argumento dice: No se gloríen en los hombres porque la sabiduría del hombre es insensata y Dios atrapa a la gente que toma ese camino (v. 19). El segundo argumento dice: No se gloríen en los hombres porque todo es vuestro (v. 21).

En el primer argumento la raíz de la vanagloria parece ser la auto-exaltación ("¡Soy sabio a los ojos del mundo!" v. 18). ¿Pero cuál es la raíz de la vanagloria en este segundo argumento en el verso 21b?

La Raíz de la Vanagloria que Pablo Está Atacando

Supongamos que estás presumiendo sobre tu maestro de la Escuela Dominical y menospreciando a otro maestro, yo voy hacia ti y te digo (tratando de parafrasear los argumentos de Pablo), "¿Porqué sientes la necesidad de hablar de esa forma? ¿No sabes que todo en este universo es tuyo? ¿No sabes que todo maestro en esta iglesia es tuyo—y el mundo, la vida, y la muerte y el presente y el futuro son tuyos?"

¿Cuál es la raíz de la vanagloria que estoy tratando de identificar al decir esto? ¿Qué estoy asumiendo—lo que Pablo está asumiendo—sobre la causa de la vanagloria cuando digo, "¿No sabes que todo en este universo es tuyo? No necesitas gloriarte en el hombre"?

Creo que Pablo está asumiendo que la raíz de la vanagloria es un sentimiento de inseguridad. En otras palabras, Pablo describe a aquellos que se glorían como personas que se sienten amenazadas o en peligro por circunstancias hostiles o desesperanzadoras. Sienten que otro maestro que no es el suyo puede brillar más y cuestionar algunos de sus elementos distintivos. Sienten que el mundo y los eventos futuros desconocidos, y la muerte en si misma son amenazantes. Tratan de reforzar su seguridad tratando de vender su propia sabiduría o la sabiduría de su líder.

La Seguridad Masiva de Pertenecer a Cristo

Pablo entonces dice que el problema es que no comprenden la seguridad masiva—y quiero decir masiva— de pertenecer a Cristo. ¿Porqué rebajarse a gloriarse en los hombres cuando todas las cosas—absolutamente todas las cosas—son tuyas? Lo que creo que significa (en base a Romanos 8:28 y 32) es que todas las cosas trabajan como tus sirvientes para tu beneficio.

Juntando los Dos Argumentos

Ahora intentemos juntar estos dos argumentos. ¿Cómo encajan entre sí? ¿Está Pablo hablando de dos tipos de gente diferentes? ¿En los versos 18–20 habla sobre una persona que se siente auto-suficiente, y en los versos 21–23 sobre una persona que se siente insegura? ¿Tiene dos diferentes tipos de gente en mente: unos fanfarrones y otros temerosos?

Se Dirige a Un Solo Tipo de Gente de Dos Maneras

No lo creo. No existe una indicación de esto en el texto. Advierte a los auto-suficientes que con orgullo se glorían en los hombres, que esto es muy insensato y peligroso (vv. 18–20); luego les dice que no deben gloriarse así (v. 21a); y luego sin dirigirse a otro grupo dice en v. 21b, "Porque todo es vuestro."

¿Cómo puede hablar a la misma gente sobre la raíz de la vanagloria como si fueran fanfarrones auto-suficientes y temerosos inseguros? Creo que la respuesta se encuentra en la primera línea del verso 18: "¡Nadie se engañe a si mismo!"

Los fanfarrones y auto-suficientes que se glorían en la sabiduría de los hombres, se han decepcionado a si mismos, ¿de qué manera? Negando su profundamente enraizada inseguridad. No hay dos tipos de gente en este texto. Es un solo tipo de gente motivada por dos fuerzas contrarias y unidas por la auto-decepción.

Dos Fuerzas Unidas por la Auto-Decepción

Una de las fuerzas es una sensación de inseguridad incorporada, vulnerabilidad, y temor en un mundo que está fuera de su control y que constituye una amenaza a su felicidad. Esto viene incorporado a nuestro estado de creaturas y está compuesto por nuestro pecado. Todos lo tenemos. La otra fuerza que impulsa a quienes se glorían es el sentimiento de que tenemos las cosas bajo control—que el hombre es el dueño de su destino, que la sabiduría humana es suficiente para resolver nuestros problemas, que lo tenemos todo solucionado—¡o conocemos a alguien que lo tiene!

¿Cuál es el pegamento que mantienen estas fuerzas unidas en un corazón? La auto-decepción. "Nadie se engañe a sí mismo; si alguno entre vosotros se cree sabio en este siglo, hágase ignorante, para que llegue a ser sabio."

Dos Raíces del Orgullo Humano que Deben ser Eliminadas

Cuando Pablo quiere desmantelar el orgullo que destruye el alma, que desgarra la comunidad, y deshonra a Dios en Corinto, debe hacer al menos dos cosas, no solo una. Debe superar la decepción de la auto-suficiencia humana, y debe resolver el problema de la inseguridad humana. Es lo que está tratando de hacer en este texto.

Dicho de otra manera, el orgullo humano tiene su raíz en dos tipos de auto-decepción. Una es la decepción que puedo manejar en mis propios problemas, y la otra es la decepción de que nadie puede manejar mis problemas.

Dicho de otra forma, hay dos maneras en que el orgullo del hombre puede deshonrar a Cristo. Una es no sentir ninguna necesidad por él. Y la otra es sentir que tu necesidad es tan grande que él no la puede solucionar. La una dice que no necesito un Cristo crucificado que me ayude. La otra dice que un Cristo crucificado no me puede ayudar. La una parece fuerte. La otra parece débil. Ambas menosprecian la gracia de Dios.

La Gracia de Dios como Acusación y Liberación

¿Por qué? Porque la gracia de Dios significa dos cosas:

  1. Necesitamos ayuda, admitámoslo.
  2. La ayuda está aquí, aceptémosla.

La gracia siempre significa estas dos cosas: humildad, necesitamos ayuda; y aliento, la ayuda está aquí.

¡Acusación y Liberación! ¡Eso hace la gracia que nos salva! Acusación: "Si alguno entre vosotros se cree sabio, ¡hágase ignorante!" Liberación: "¡Todo es vuestro!"

El Maestro-Pastor y Consejero Trabajando

Veamos a Pablo el maestro-pastor y consejero traer su consejo en un gran final centrado en Dios.

A los Auto-Suficientes

A los auto-suficientes les dice, "Su sabiduría es insensatez. Déjenla, conviértanse en tontos. A menos que se vuelvan como niños nunca entrarán en el reino de Dios."

A los Temerosos e Inseguros

A los temerosos, inseguros y amenazados les dice, "Vanagloriarse en los hombres es un substituto barato de heredar el universo. ¿No se dan cuenta de que Dios ha hecho todas las cosas para darles gozo?

  • Todo maestro existe para tu beneficio.
  • Todo el mundo en su corrupción secular conspira en vano contra tu alma, ya que Cristo ha vencido al mundo (Juan 16:33).
  • El aguijón de la muerte se ha ido; tu último enemigo te servirá sin darse cuenta para que entres en la gloria.
  • Ni lo presente ni lo futuro te podrá separar del amor de Dios.
  • A aquellos que él justifique, a aquellos glorificará.
  • 'Aquel que nos dio a su propio Hijo, ¿no nos dará también todas las cosas buenas?'"

Negando el Ultimo Lugar para la Vanagloria

Solo para asegurar que no convirtamos esta gracia en una base para vanagloriarnos en nosotros mismos, Pablo añade en el verso 23: "Y vosotros sois de Cristo." En otras palabras, la única razón por la que cualquiera de estos beneficios son nuestros es porque somos de Cristo. Él hizo todo el universo para nuestro gozo, porque existimos para el suyo. ¡De manera que aquel que se gloríe, gloríese en el Señor! No en el hombre.

Yendo un Paso Más Allá

Pero Pablo, el maestro-pastor y consejero aun no ha terminado de tratar con el problema del orgullo. Nos saca de nuestra decepción de auto-suficiencia. Nos levanta para que veamos el universo como nuestra herencia. Nos lleva más alto para que veamos a Cristo como el principio y fin de todo. Hay un paso más. El capítulo termina con las palabras, "Y Cristo es de Dios."

Al final Jesucristo entregará el reino al Padre y Dios el Padre será todo (15:28). "Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos.” (Romanos 11:36).

Cómo Aplicar Esto a lo que Nos Viene Por Delante

Voy a terminar con una aplicación de este texto al reto que está frente a nosotros en S*P*A*N los NOVENTAS. Un reto que lo pondría así:

¿Cómo podemos, en un nuevo santuario, ser el tipo de gente que esparce la gracia de Dios humilde y esperanzadora, a la mayor cantidad de gente posible?

Este texto está diseñado para ayudarnos a evitar dos peligros. Uno es el peligro de apartar nuestra gloria de Dios y ponerla en el edificio. Comenzar a gloriarnos menos en Cristo y más en la arquitectura. Enfocarse en el espacio en lugar de en la gracia.

Sobre este peligro, el texto dice: gloriarse en logros humanos es una calle sin salida. Si olvidas que existes para Cristo, y que debes gloriarte únicamente en él, tu nuevo santuario no será más que un monumento a la insensatez humana. No te engañes. Lo que es exaltado entre los hombres es abominación ante Dios.

El otro peligro que enfrentamos es ser paralizados por el temor. El debilitante pensamiento de que hay demasiado en contra nuestra y que no podemos hacer nada. El dinero está contra nosotros, el tiempo está contra nosotros, el parqueo está contra nosotros, la inflación está contra nosotros, la detracción de la misión dada está contra nosotros, la fatiga está contra nosotros. Resultado: paralizado por la desesperanza.

Ante este peligro el texto ofrece una respuesta que, si la hubiera escrito aquí, se la llamaría despliegue para recaudar fondos, ostentación, o exageración política. Pero no la escribí yo, fue Dios. Y es muy serio, y muy preciso: "Sea Pablo, sea Apolos, sea Cefas, sea el mundo, sea la vida, sea la muerte, sea lo presente, sea lo por venir, todo es vuestro, y vosotros de Cristo, y Cristo de Dios."

No se gloríen y no teman. Sean humildes y valientes.

A aquellos que vivan para predicar mi nombre a todas las naciones, dice el Señor, nada les faltará.


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