Por el amor de Dios, volumen 1/5 de diciembre
De Libros y Sermones BÃblicos
Por D.A. Carson
sobre Vida Devocional
Capítulo 341 del Libro Por el amor de Dios, volumen 1
Traducción por Beatriz G. Negron
5 DE DICIEMBRE
2 Crónicas 5:1—6:11; 1 Juan 4; Nahúm 3; Lucas 19
UNA VEZ QUE EL TEMPLO HA SIDO EDIFICADO, el paso final antes de la dedicación del templo es traer el arca del pacto desde el tabernáculo antiguo, que ahora descansa en Sión, la ciudad de David (parte de Jerusalén), a su nuevo lugar de reposo en el lugar santísimo del templo. En 2 Crónicas 5:1-6:11 no se relata esta transición solamente, sino también las declaraciones de apertura de Salomón antes de su oración de dedicación (vea la meditación de mañana). La mudanza del arca y las declaraciones de apertura de Salomón demuestran ser importantes.
La mudanza en sí misma sigue las indicaciones de la Ley: solo a los levitas les es permitido cargar el arca. Pero la mudanza es sin lugar a dudas un evento nacional. Los ancianos de Israel y los jefes de los clanes vienen de todas partes de Israel y se reúnen para esta gran celebración. La mudanza es acompañada de sacrificios tan abundantes que el número de animales sacrificados no se puede contar (5:6). Finalmente, el arca es alojada bajo las alas de los querubines en el lugar santísimo. Por otro lado, el cronista menciona que en este instante las tablas de la Ley todavía descansan dentro del arca del pacto. Se presume que la vasija con el maná y la vara de Aarón que reverdeció fueron capturadas por los filisteos. En todo caso, las orquestas y los coros se sueltan, incluyendo una sección de 120 trompeteros. Los cantores alaban a Dios con la famosa frase “Él es bueno; su misericordia es para siempre” (5:13)
Dos detalles merecen especial comentario.
(1) En el pasado, la evidencia de la presencia de Dios en el tabernáculo era la nube. Ahora, la misma nube llena el templo; en realidad, la gloria del Señor llena el templo de tal manera que los sacerdotes son sacados fuera sin poder entrar a realizar sus funciones (5:13-14). Esto demuestra que Dios está complacido con el templo; que él mismo ha autorizado la mudanza desde el tabernáculo hacia el templo; y sobre todo, que si el templo es su templo, no ha de ser domesticado por meros ritos, no importa cuán elaborados sean. La gloria de su presencia es lo importante.
(2) Las declaraciones de apertura de Salomón también contribuyen al sentido de continuidad. A lo mejor algunos puristas fueron tentados a decir que hubiera sido mejor quedarse con el tabernáculo: después de todo, eso fue lo que Dios ordenó en el monte Sinaí. Así que Salomón hace una revisión a los pasos que han traído el relato hasta este punto: las promesas de Dios a David, la elección de Dios por Jerusalén y el lugar de este templo, la selección de Dios de que fuera Salomón el que hiciera la construcción actual en lugar de David, y así por el estilo. Así que el templo, muy lejos de ser una novedad cuestionable, es el próximo paso en la historia redentora y el cumplimiento de las buenas promesas de Dios (6:10-11)
Vota esta traducción
Puntúa utilizando las estrellas