Por el amor de Dios, volumen 1/5 de junio
De Libros y Sermones BÃblicos
Por D.A. Carson
sobre Vida Devocional
Capítulo 158 del Libro Por el amor de Dios, volumen 1
Traducción por Luximar Arenas Petty
5 DE JUNIO
Deuteronomio 9; Salmos 92-93; Isaías 37; Apocalipsis 7
SI DEUTERONOMIO 8 LES RECUERDA A LOS israelitas que Dios es el Único quien les da todas sus bendiciones materiales, no menos la habilidad de trabajar y producir riquezas, Deuteronomio 9 insiste que él es también el Único quien los capacita para tomar posesión de la Tierra Prometida y vencer a sus enemigos. Antes de la contienda, los israelitas todavía están luchando con sus temores. Dios en su gracia les asegura: “Comprende, pues, hoy, que es el SEÑOR tu Dios el que pasa delante de ti como fuego consumidor. El los destruirá y los humillará delante de ti” (9:3). Pero después de la lucha, la tentación de los israelitas será completamente diferente. Entonces ellos serán tentados a pensar que, cualquiera que sea que teman antes del evento, era su propia superioridad intrínseca que les permitía llevar a cabo la hazaña. Así que Moisés les advierte:
No digas en tu corazón cuando el SEÑOR tu Dios los haya echado de delante de ti: "Por mi justicia el SEÑOR me ha hecho entrar para poseer esta tierra" Sino que es a causa de la maldad de estas naciones que el SEÑOR las expulsa de delante de ti. No es por tu justicia ni por la rectitud de tu corazón que vas a poseer su tierra, sino que por la maldad de estas naciones... para confirmar el pacto que el SEÑOR juró a tus padres Abraham, Isaac y Jacob. Comprende, pues, que no es por tu justicia que el SEÑOR tu Dios te da esta buena tierra para poseerla, pues eres un pueblo de dura cerviz. (9:4-6)
¿Y la evidencia de este último punto? Moisés les recuerda de sus rebeliones lamentables durante los años en el desierto, comenzando desde el desdichado incidente del becerro de oro (9:4-29).
¿Qué aprenderemos? (1) Aunque la aniquilación de los cananeos nos llena de vergonzoso horror, esto es un sentido en el cual (¿Me atrevo a decirlo?) mejor que nos acostumbremos a ello. Es una de las piezas con el diluvio, con la destrucción de varios imperios, con el mismo infierno. La respuesta apropiada es Lucas 13:1-5: a menos que se arrepientan, todos pereceréis igualmente. (2) Puede ser cierto decir que los israelitas ganaron porque los cananeos eran muy malvados. No se supone que los cananeos perdieron porque los israelitas eran muy buenos. Dios estaba trabajando para mejorar a los israelitas en su fidelidad propia del pacto. Pero ellos eran sumamente tontos si ellos creían, después del evento, que se habían ganado su triunfo. (3) Nuestras tentaciones, como las de los israelitas, varían con nuestras circunstancias: temor desleal en unas circunstancias, orgullo arrogante en otras. Únicamente el caminar cerca de Dios nos da la autocrítica que aborrece a los dos.
Vota esta traducción
Puntúa utilizando las estrellas