Siete preguntas para hacerle al novio de su hija

De Libros y Sermones Bíblicos

No tengo una hija, pero sí tengo una hermana. Una hermana que recientemente se comprometió. Antes de que ella se comprometiera, él en aquella época su novio y yo tuvimos una conversación. Mis habilidades potenciales de interrogador tipo de la CIA, similares a las que mí ahora suegro me sometió hace casi dos años, se pusieron en marcha. Yo quería proteger a mi hermana y conocer e incentivar al hombre que ya estaba pensando en pedir la mano. Yo quería para ella y su prometido lo mejor en el Señor.

De ninguna manera, las preguntas que se me ocurrieron fueron exhaustivas. Y algunas podrían adaptarse mejor en otro momento a lo largo de la relación (antes de la primera cita, o a medida que la relación se vuelve más seria, o antes del compromiso, o después). Hice estas preguntas antes de su compromiso, y rezo para que sirvan como un buen punto de partida para otros hermanos (e incluso padres) cuando se sienten a conversar con un joven que busca conquistar a una de nuestras preciadas mujeres.

Contenido 1 1. ¿Cómo te salvó Dios? 2 2. ¿Qué significa seguir y parecerse a Cristo ahora? 3 3. ¿Luchas contra la pornografía? 4 4. ¿Tienes íntimos amigos varones? 5 5. ¿Qué te gusta de ella? 6 6. ¿Tienes planes de seguir adelante? 7 7. ¿Qué ha aconsejado tu comunidad? 8 Sea lo suficientemente cuidadoso al hablar

1. ¿Cómo te salvó Dios?

Para empezar, no asumamos que ser un buen tipo es igual a ser un cristiano genuino. Un hombre no requiere nacer de nuevo para tener la capacidad de mostrar su mejor comportamiento ante la familia de una muchacha. Como padres con hijas bajo nuestro cuidado, o como hermanos mayores que sienten una responsabilidad ante Dios de proteger a una hermana menor, la defendemos tanto de los lobos mundanos, como de los macho cabríos educados y bien cuidados.

Si bien no se hace un interrogatorio completo, y se recibe manifestaciones fe con la debida comprensión, escuche quién es, de dónde viene y si hay evidencia de signos imprescindibles en el Señor. Esto podría desembocar en un tiempo de adoración juntos (como lo fue para mí), ya que ambos comparten y testifican la abrumadora gracia de Dios en sus vidas.

2. ¿Qué significa seguir y parecerse a Cristo ahora?

¿Tiene costumbres cristianas saludables?. ¿Está creciendo en su amor por la palabra de Dios?. ¿Tiene vida de oración?. ¿Él toma en serio cada vez más, respecto a las cosas santas?. ¿Anhela vivir para la gloria de Dios?. ¿Muestra el tipo de masculinidad de sí mismo, que se preocupa por los olvidados, y con gusto, asume la responsabilidad y se sacrifica constantemente en beneficio de los demás?. ¿Es él un miembro activo de una iglesia saludable?. Trayectoria es una palabra útil aquí. ¿El hombre sentado ante ti, hoy está sembrando semillas para convertirse en un esposo piadoso del mañana?.

3. ¿Luchas contra la pornografía?

Esta no es la primera pregunta que se debe hacer, pero la deberíamos preguntar directamente, sin ambages, mirando al joven a los ojos, "¿Luchas contra la pornografía?". La lujuria de un joven abrasa un fuego que, cuando no es destruido por el Espíritu, se desbordará y afectará el trato que le dé a su hija. Dos cosas a tener en cuenta: la trayectoria y la guerra. ¿Batalla constantemente contra sus deseos pecaminosos o cede a ellos?. ¿Cómo ha sido la historia en los últimos años?. ¿Qué ayuda tiene él en su vida para cortar las ramas de esos deseos y salvar su alma (Mateo 5:30)?.

Ve él esta oportunidad para cuidar, no solo a ella como tu hija, sino también por él como un hijo o hermano menor en Cristo. Si él perpetuamente se "cae" y aún desea salir con su hija, tal vez se debe insistir en que se tome un tiempo para que crezca en esta área. --- no solo para ganar su aprobación, sino para prepararse para ser un hombre que mata diariamente a su propio pecado. En algunos casos, podría llegar a ser un magnifico modelo de pureza y soldado que todavía no se ha desarrollado.

4. ¿Tienes íntimos amigos varones?

Sorprendentemente, algunos jóvenes de hoy llenan su grupo de amigos principalmente con mujeres. Si su círculo interno está formado por mujeres, esto no es saludable. Si pocos hombres (o ninguno) lo conocen en su iglesia local, esto ondea una bandera de advertencia.

Si él tiene amigos, ¿cómo son?. Un compañero de idiotas sufrirá daño, al igual que una mujer que sale con un hombre que tiene a idiotas como compañeros (Proverbios 13:20). Si no tiene pensamientos de compañerismo con los hombres, no deseará que los hombres mayores lo disciplinen, no hay hombres que lo conozcan y que de ellos saque fuerzas (Eclesiastés 4:12), demuestra que él --- salvo circunstancias únicas --- en la actualidad no es el adecuado para salir con su hija.

Si él tiene amigos íntimos, puede hablar con alguno de ellos, que pueda contarle más sobre el carácter de este hombre.

5. ¿Qué te gusta de ella?

Ahora aquí, como en todas las demás preguntas, puede decirte lo que él cree que quieres escuchar. Pero si la situación de su respuesta esmerada detrás de lo encantadora y amable, parece superficial, es probable que el riesgo siga siendo alto y que no esté listo para seguir adelante. ¿Él se preocupa por ella debido a Cristo?. ¿Es evidente que él ve (y ama) lo que es más precioso: -- su alma?. Pregunte lo qué hizo mi suegro: si fuera juzgado, ¿qué evidencias tiene, para demostrar que realmente se preocupa por ella?.

6. ¿Tienes planes de seguir adelante?

Un hombre no necesita tener un plan completo para diez años. Pero, ¿tiene alguna percepción de hacia dónde Dios lo guía (y potencialmente a su hija) en los próximos años?. ¿Tiene expectativas y perspectivas realistas de brindarse a ella, sacrificando sus comodidades personales, por su bien y garantizando su bienestar, incluso cuando sea inconveniente y costoso?. Él puede ser un estudiante que todavía no está seguro --- pero esto no tiene por qué excluirlo del matrimonio. ¿Pero piensa responsablemente sobre el futuro?. ¿Ha considerado cómo su compromiso continuo afecta ese futuro?. ¿O está atrapado en el enamoramiento y simplemente quiere la relación con ella por la diversión de hacerlo?.

7. ¿Qué ha aconsejado tu comunidad?

Los buenos jóvenes, incluso los piadosos, pueden carecer de una comunidad fuerte por varias razones. Esta no necesita ser una acusación automática contra su carácter, sino una indicación de su situación actual. Escuche si tiene o no categorías para buscar y hacer caso del consejo de otros.

¿Muestra signos de humildad ante observadores externos, en lugar de acorazarse interminablemente dentro de sí mismo?. ¿Ha discutido su búsqueda con un mentor piadoso, un pastor o un líder de un pequeño grupo?. Podría ser un problema si él tiene tales hombres en su vida y, sin embargo, no ha escuchado su voz. “Sin la participación de abogados, los planes fallan, pero con muchos asesores tienen éxito” (Proverbios 15:22). “Quien se aísla busca su propio deseo; pero estalla contra todo buen juicio ”(Proverbios 18: 1).

Sea lo suficientemente cuidadoso al hablar

Las situaciones variarán, se aplicará la prudencia, se ofrecerán oraciones y las consideraciones de los deseos de su hija deben medirse adecuadamente, pero al final, un padre (o hermano) en el Señor debe hablar con el pretendiente de una hija (o hermana). ¿Se te ocurre alguna buena razón para no hacerlo?.

Como un predicador ha preguntado, si un hombre llegara a la puerta pidiendo que le demos las llaves de nuestro auto, asegurándonos que nuestro vehículo lo va a regresar a las nueve de la noche, ¿alguno de nosotros le entregaría las llaves?. Tendríamos preguntas para él: ¿Quién es él?. ¿Es de confianza?. ¿Cuáles son sus intenciones?. La pregunta entonces se convierte en, ¿nuestras hijas (y hermanas) tienen menos valor que el acero fundido que descansa sobre cuatro ruedas?.

Incluso si ella no es cristiana pero está bajo tu techo y abastecimiento, y protestando por tomar sus propias decisiones, recuerda que Dios nos llama a cuidar a nuestros hijos incluso más de lo que ellos, a veces, quieren que los cuidemos. La crianza de los hijos no tiene que ver con la popularidad y cuestiones de moda, sino con la protección y la provisión amorosa.

Entonces, mientras las hijas de esta edad, salen con menos supervisión que nunca, los hombres de Dios enfrentan la ocasión con gracia y verdad, para preguntar directamente, hablar con claridad y amar, haciendo una intervención justificada.