Animandonos Unos a Otros

De Libros y Sermones Bíblicos

“Y considerémonos unos a otros para alentarnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.” Hebreos 10:24 - 25

Uno de los problemas que continuamente enfrentamos los creyentes es el hecho de pensar que estamos bien por nosotros mismos. A menudo pensamos que no necesitamos a otros Cristianos para nuestro crecimiento espiritual.

Sin embargo, nos necesitamos los unos a los otros. Necesitamos que nuestros hermanos nos animen para ser fieles al Señor. Sin el apoyo de otros, estamos en un gran riesgo de caer en la apostasía.

Nuestra necesidad de otros para el crecimiento y la perseverancia es el enfoque del pasaje de hoy. A la luz del grandioso y efectivo sacrificio que Cristo ha hecho (Hebreos 9:1-19:18), se nos exhorta a congregarnos de manera que podamos estimularnos unos a otros en el amor y las buenas obras, ya que que el regreso de Cristo está cada vez más cerca (Hebreos 10:24-25).

Como vimos, los Cristianos están llamados a una fe viva y activa, a una fe que produce amor y buenas obras. Esto no significa que las buenas obras son meritorias o que de alguna manera ellas añaden algo a la salvación. Mas bien, son la evidencia de una fe verdadera en Dios que es amor y que es Él mismo quien realiza las buenas obras. Donde el amor y las buenas obras están totalmente ausentes, entonces la fe está también ausente.

Cuando nos estimulamos unos a otros al amor y las buenas obras, suceden dos cosas. En primer lugar, los miembros de la iglesia que han profesado una fe falsa ven que deben dejar de hacerlo y que deben poner su fe solamente en Cristo ya que se les está animando a amar a Dios con todo su corazón, con toda su alma, sus fuerzas y su mente.

En segundo lugar, y quizás más importante, cuando nos animamos unos a otros, los verdaderos creyentes en la iglesia son motivados a perseverar en su fe. Fe es una continua posesión, profesión, y acción, no es solo un evento que ocurre una vez. Calvin dice que, en este pasaje, el autor de Hebreos “Quiere decir que todos los santos deben por todos los medios posibles esforzarse por congregarse en todo lugar; ya que somos llamados por el Señor en esta condición, cada uno debe esforzarse por guiar a otros en la verdad, para traer al extraviado al camino correcto, tender una mano al caído, ganar a los perdidos. Pero si tenemos que invertir tanto trabajo en aquellos que están fuera de la grey de Cristo, ¿cuánto más diligencia se requiere en la exhortación de los hermanos que ya están con nosotros?

Coram Deo

Pregúntese a sí mismo: “¿Realmente creo que necesito apoyo para mantener mi fe? La respuesta debería ser sí. Los verdaderos creyentes comparten sus tribulaciones con otros y oran por cada uno de manera que puedan perseverar. Permita que los hermanos en Cristo le animen y si usted no es parte de una iglesia, busque una y unase pronto a ella.

Pasajes para estudiar más adelante:

Num. 11:16–17
1 Salm. 18:1–5
Gal. 6:1–2
1 Tes. 5:11