Misiones Mundiales: El Propósito, la Promesa y el Precio

De Libros y Sermones Bíblicos

El propósito de las misiones mundiales es propagar una pasión por la supremacía de Dios en grupos de personas donde no hay una iglesia indígena y evangelizadora. Esto supone algo acerca de “discípulos” y algo acerca de “naciones”. Estos términos se usan en Mateo 28:19: “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones”. Mi suposición acerca de los “discípulos” es que son personas que han visto “la gloria de Dios en la faz de Jesucristo” (2 Corintios 4:6) y que valoran a “Dios en Cristo” como el valor supremo de sus vidas (Filipenses 3:8). Mi suposición acerca de “naciones” es que no son países geográficos y políticos sino “tribus, lenguas, pueblos y grupos étnicos” (Apocalipsis 5:9; 7:9). Basándonos en estas dos suposiciones, entonces, el propósito de las misiones mundiales es propagar una pasión por la supremacía de Dios en grupos de personas donde no existe una iglesia indígena y evangelizadora.

Según un grupo de investigación (Joshua Project 2000), en junio de este año había 579 pueblos en el mundo con poblaciones de más de 10 000 que no tenían ningún esfuerzo misionero de plantación de iglesias en ellos. En julio, la Consulta Mundial sobre la Evangelización Mundial (GCWE ‘97) se reunió en Pretoria, Sudáfrica, con el resultado de que todos los pueblos, excepto 172, se convirtieron en el blanco de las agencias misioneras. Este es un progreso notable para terminar la verdadera tarea misionera de la iglesia. (Si quieres mantenerte al día en cosas como esta, suscríbete gratis a Mission Frontiers, US Center for World Mission, 1605 Elizabeth St. Pasadena, CA 91104.)

Pero la verdadera fuente de esperanza en las misiones mundiales no son las estadísticas del hombre; es la promesa de Dios. Mateo 24:14 —“Será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones”. Los “serás” de Dios están respaldados por la omnipotencia. Esta gran obra de propagar una pasión por Dios en grupos de personas donde no hay iglesia indígena y evangelizadora no puede fallar. Esta es la gran esperanza de la tarea misionera. La Palabra de Dios no fallará.

Pero el precio será muy alto. No tan alto que no valga la pena. Pero muy alto. Jesús lo expresa en Mateo 24:9: “Seréis aborrecidos de todas las gentes [naciones] por causa de mi nombre”. El propósito y la promesa no sucederán sin el precio de la oposición y el sufrimiento. De hecho, el precio no es sólo el resultado sino la estrategia del propósito. Dios tiene un cierto número de mártires designados (Apocalipsis 6:11). Jesús dijo que cuando ustedes sean arrestados y llevados ante los gobernadores, “esto os será ocasión para dar testimonio” (Lucas 21:13). El propósito, la promesa y el precio están unidos.

¿Notaste la frase “todas las naciones” en el propósito, la promesa y el precio?

“Haced discípulos a todas las naciones”. Propósito

“Será predicado…este evangelio…a todas las naciones”. Promesa

“Seréis aborrecidos de todas las gentes [naciones]”. Precio

Yo llamo a ustedes con Hebreos 13:13 (¡otra vez!) y “salgamos, pues, a Él, fuera del campamento, llevando Su vituperio”. ¿Qué significará esto para ti? Tendrá que ver con “todas las naciones”.

Buscando un corazón lleno para esto contigo,

El Pastor John